Consumir en exceso y durante varios días calorías procedentes de azúcares, harinas refinadas, mantequillas y alcohol, quizá no tenga un impacto muy importante en las personas que mantienen un estilo de vida sano y activo, pero puede tener una repercusión considerable en el peso corporal de aquellas personas con sobrepeso u obesidad y que son proclives o están habituadas al sedentarismo.
Por ello, en los días posteriores a los excesos alimenticios podemos reequilibrar nuestro organismo, siguiendo una alimentación depurativa, consumiendo alimentos saludables que nos ayuden a eliminar ciertas sustancias y que a la vez nos nutran, explica la dietista-nutricionista Carmen Escalada.
“Es una medida aconsejable para depurar nuestro organismo tras la sobrecarga y el sobrepeso derivados de los excesos y desequilibrios gastronómicos y el abandono de nuestras restricciones habituales, en los que hemos incurrido durante esos “días de postres y comidas suculentas”, según explica. Lea: 5 recomendaciones para detoxificarse después de unos días de descanso
¿Qué es la dieta depurativa?$>
Seguir una dieta depurativa, no consiste en beber solo líquidos durante varios días o seguir una dieta ‘detox’ publicada en revistas o promocionada por una ‘celebrity’, opciones que pueden producir un desequilibrio metabólico aún mayor, sino en mantener una alimentación saludable, que proteja nuestro cuerpo y le permita recuperar su equilibrio y vitalidad, puntualiza.
Para que esta dieta sea más llevadera y eficaz, y reducir las posibilidades de abandonarla antes de tiempo, es preferible evitar que sea demasiado restrictiva, pasando de comer en exceso a “no comer casi nada”, siendo preferible enfocarse en la calidad de lo que comemos y bebemos, señala esta experta.
Para comenzar una dieta depurativa, la dietista-nutricionista clínica Sonia Peinado recomienda efectuar una correcta elección de los alimentos, prefiriendo aquellos que contengan no tengan grasas, azúcares, alcohol y sodio; sean ricos en vitaminas, minerales y proteínas no grasas; y que contengan abundante fibra y agua. Lea: Cenar pesado y tarde puede provocar pesadillas: qué hacer, según expertos
También es importante consumir los alimentos con moderación, sin comer demasiada cantidad de ninguno en particular aunque sea muy saludable, así como efectuar entre 4 y 6 comidas diarias, sin saltarse ninguna, comenzando por el desayuno, para conseguir que nuestro metabolismo se mantenga activado desde que comenzamos el día, según Peinado.
Alimentos que depuran$>
Basándose en las anteriores premisas, las nutricionistas de IMEO Carmen Escalada y Sonia Peinado, recomiendan incluir los siguientes alimentos y bebidas en una dieta para depurar el organismo:
1. Frutas y verduras. Para preservar la mayor cantidad posible de nutrientes, fibra y agua de estos alimentos, es preferible consumir las frutas crudas, y cocinar las verduras al vapor.

2. Aguas, líquidos y zumos. Para depurar el organismo y ayudar a que se diluyan y eliminen las toxinas que ha acumulado es recomendable beber entre dos y tres litros diarios de agua y zumos naturales sin azúcares añadidos y líquidos diversos, evitando los refrescos, gaseosas y bebidas alcohólicas.
3. Lácteos desnatados. Hay que dar prioridad al yogur y la leche, así como a los quesos frescos, ya que contienen menos grasas y sodio y más agua, que los quesos curados.

4. Cereales integrales. Estos alimentos aportan fibra y nutrientes, producen una mayor sensación de saciedad, y además contribuyen a “limpiar” los intestinos.
5. Carnes bajas en grasas y colesterol. Durante el periodo depurativo es recomendable consumir pechuga de pollo o de pavo sin piel y cocinadas a la plancha, así como pescados blancos, dejando las carnes rojas y los pescados azules (alimentos más grasos) para un consumo esporádico. Lea: Cuando de comer carne se trata, menos es mucho más: ¿por qué?

6. Hierbas y especias. Son recomendables para condimentar los alimentos y conseguir que estén más sabrosos, sin utilizar tanta sal.
7. Alimentos aliados del hígado. Los vegetales en general y las verduras de hoja verde (espinacas, acelgas) en particular son muy interesantes; el brócoli, los cítricos, el ajo, el té verde, las nueces, el pan integral de 8 cereales, el aguacate y el aceite de oliva ayudan a la función depurativa de nuestro hígado, el órgano encargado de eliminar la mayoría de las toxinas del cuerpo, concluyen.