El auditorio principal de Yonsei University vivió una de sus noches más emotivas este 9 de diciembre, cuando niños y adolescentes con trastorno del espectro autista (TEA), beneficiarios del programa del Centro de Tratamiento Min Yoongi, subieron al escenario para ofrecer un concierto frente a unas 1.600 personas. La presentación, que combinó música, terapia y un mensaje de inclusión, se convirtió en un testimonio del impacto que ha tenido el centro fundado con el apoyo del integrante de BTS, Suga.

El evento marcó el cierre de un año decisivo para la institución, inaugurada en septiembre como parte del Hospital Severance de Seúl y dedicada a ofrecer terapias integrales, incluidas intervenciones basadas en música y dinámicas de coordinación emocional. Durante meses, los niños se prepararon a través del MIND Program, que utiliza el arte como herramienta terapéutica y de desarrollo social.
Suga se deja ver en video de su fundación
Antes de que iniciara la presentación, se proyectó un video sorpresa de Suga, quien llamó a cada niño por su nombre y les dedicó mensajes personalizados de aliento. “Estoy muy orgulloso de su actuación de hoy”, dijo el artista, actualmente en servicio militar. Su aparición provocó aplausos entre el público y lágrimas entre varios padres y terapeutas que acompañaron el proceso desde el inicio.
Ya en escena, los participantes interpretaron piezas creadas especialmente para el programa, combinando instrumentos, coro y movimientos guiados por terapeutas. Para muchos era su primera vez ante un público tan grande, lo que convirtió cada minuto en un logro personal y colectivo. El ambiente en el auditorio osciló entre la emoción, la sorpresa y la admiración hacia el esfuerzo de los jóvenes intérpretes.
La directora del centro, Cheon Geun-ah, destacó en su intervención que la presentación fue “el resultado de un milagro continuo”. “Dar genera más generosidad. Los niños aprendieron el poder de la paciencia, la coordinación y la confianza en sí mismos”, afirmó. También expresó su agradecimiento a Suga por haber posibilitado el proyecto a través de una donación millonaria destinada a construir y equipar el centro.
Todos los ingresos del concierto serán destinados íntegramente al funcionamiento del Centro de Tratamiento Min Yoongi y al fortalecimiento del programa terapéutico, que continuará expandiéndose en los próximos meses.
El concierto no solo celebró el talento de los niños, sino que envió un mensaje poderoso sobre la inclusión y el potencial transformador de la música. Para los asistentes, la noche quedará en la memoria como un recordatorio de que, con el apoyo adecuado, cada niño puede encontrar su propio escenario.

