Definitivamente cuando se entra en la etapa terminal de una enfermedad y las expectativas de superarla son muy cortas, desde la medicina se trabaja para llevar calidad de vida a ese paciente, bien sea adulto o pediátrico.
En este aspecto se habla de cuidados paliativos, es decir, una atención que va enfocada a mejorar la calidad de vida de pacientes en un estado grave, con un padecimiento incurable, por tanto su aplicación va encaminada al manejo de los síntomas y apaciguar el sufrimiento, explica el doctor Jorge Luis Correa, de la IPS Salud y Bienestar.
Los cuidados paliativos se aplican a pacientes crónicos o con enfermedades graves e incurables, por lo que requiere de una evaluación médica que se basa en escalas, las cuales van a determinar si éste califica para ser incluido en este tipo de atención especial. (Lea aquí: Aprenda a ser consciente con el consumo de azúcar)
Una vez se llega a esta fase, se activa la observación y seguimiento a través de un equipo, que está formado por un médico paliativista, médico general, enfermera, psicólogo, trabajadora social y guía espiritual. Este grupo empieza a atender al paciente en todas las esferas, es decir, desde la física, la emocional, hasta la espiritual.
“Si estos pacientes sufren dolores que le desmejoran notablemente su calidad de vida, nos enfocamos en ese problema y la atención va desde lo medicamentoso, hasta un soporte psicológico y espiritual”, indica el doctor Correa.
De otra parte, puede existir una serie de síntomas que lo afectan y aunque ya no va a haber cura, el trabajo médico de cuidados paliativos se encarga de apaciguar ese sufrimiento de una forma integral con esa muldisciplina.
La aplicación se brinda en tres esferas, la hospitalaria, que generalmente se hace con preponderancia en instituciones hospitalarias de atención de pacientes crónicos; en el domicilio, o ambulatoria, esta última destinada a pacientes que pueden ameritar cuidados paliativos, aun cuando tenga movilidad, advierte el profesional.
¿Cómo funciona?
Muchas veces el sistema de salud desatiende a sus pacientes crónicos, más si se trata de una enfermedad terminal, careciendo de la dignificación que todo ser humano merece a lo largo de su vida.
A partir de allí, los cuidados paliativos empiezan a suministrar el tratamiento desde un enfoque psicosocial, se eligen los medicamentos y la vía de administración, teniendo en cuenta que el proceso no solo se orienta al paciente, también incluye a la familia y al cuidador, que muchas veces arrastra ese sufrimiento hasta derivar en enfermedad.
Algunos pacientes, por su condición, deben permanecer en una Unidad de Crónicos, incluso pueden tener ventilación mecánica, traqueotomía, gastrostomía y una serie de cuidados que salen de la atención hospitalaria habitual, también podrían permanecer en su domicilio, pero con todos los requerimientos que su estado amerita.