Siendo uno de los más grandes exponentes de la salsa contemporánea, el portorriqueño Gilberto Santa Rosa no se detiene en su misión de encumbrar el género, rescatar temas icónicos, e interpretar esas letras con las cuales creció y forjó su carrera, aunque también, tiene claro que sus colegas hacen parte de ese importante recorrido y con ellos quiso en esta nueva oportunidad hacer un álbum muy especial.
Acostumbrándose a esta nueva normalidad que impone el mundo y siempre activo en lo que a música se refiere, el tiempo de receso en los escenarios ha sido determinante para poner al Maestro Santa Rosa a producir, desde canciones que se afianzan en el corazón y brindan esperanza en los momentos más difíciles, como lo hizo con “Canta mundo”, interpretado con el acompañamiento de la Orquesta Sinfónica de Caldas, hasta presentar un compendio maravilloso que lo llevó a cantar con grandes figuras salseras.
Este álbum que se ha denominado “Colegas”, no es más que esa exaltación a la salsa, un trabajo con siete años de preparación, para lo cual Gilberto pudo escoger desde cada canción, hasta a esos amigos que no podían faltar. De esta manera fue creciendo la lista y con los que se “mueven en su misma salsa”, se dio por fin el aviso de salida para que los seguidores disfruten de una verdadera joya musical.
El proceso
Para un artista, cada álbum es una historia y en este caso no sería la excepción. Santa Rosa aclara que lo primero que hizo fue escoger los músicos, más adelante se fue a seleccionar los temas, grabarlos y una vez concluida esta parte, decidió que los interpretaría acompañado.
Con el repertorio listo fue verificando por qué cada tema tendría, además de su voz, la del cantante escogido, entonces con esta mecánica y el perfil de cada canción, muchos de sus colegas se quedaron por fuera, afirma. De otra parte, el Maestro también comenta que inicialmente no pensó en un disco, su propósito era cantar solo y dejarlo como un trabajo para disfrutar en su casa.
Las modificaciones se fueron dando en el camino, por eso los acompañantes llegaron cuando gran parte del disco se encontraba listo. Igualmente Gilberto comenta que encontró receptividad en los escogidos, con sesiones “mágicas” debido a la admiración y respeto mutuo que se profesan.
Se trató de una camaradería absoluta, muchos de ellos son contemporáneos, crecieron juntos artísticamente hablando, reflejan los mismos intereses y hasta trabajaron en las mismas orquestas en sus inicios, por lo que se convirtió finalmente en una fiesta de amigos.
“Colegas” también hace un recorrido por ese Caribe sonoro que tiene mucho por brindar. Hay intérpretes boricuas, también cubanos y José Alberto “El Canario”, representando a República Dominicana, y Gilberto Santa Rosa quedó tan entusiasmado, que tal vez se anime a hacer un segundo volumen.
El repertorio está orientado a la salsa tradicional. Hay canciones que interpretó en los grupos de sus inicios, otras que siempre quiso cantar con los arreglos que pensaba le vendrían mejor y así fue el proceso que tardó siete años, pero que finalmente se lanzó el 21 de agosto, como un regalo en el día de su cumpleaños.
Inicialmente se concibió como un archivo de música personal, de tal manera que “Colegas” fue creciendo y al final el boricua se encontró con un listado de buenas piezas atemporales que lo van a situar siempre en la época que se escuche, algo que caracteriza a la propuesta del Caballero de la Salsa.
De las diecinueve canciones que componen el álbum, Gilberto indica que fue un poco egoísta y dejó tres temas para interpretarlos en solitario. Uno de esos es “Camínalo”, de Alain Pérez, que después de escuchar una versión de Maite Hontelé y Diego Galé, decidió hacer la suya; el otro es “Sonerito”, donde se permitió tocar el bongó, y “Ban Ban Queré”, un clásico que siempre quiso interpretar.
Además de salsa, también hay bolero, y ese Medley se lo entregó al Maestro Nino Segarra, a quien considera una voz autorizada para tal interpretación.
En “Colegas”, merece nombramiento especial “El mejor sonero”, junto a Víctor Manuelle, también “La Familia”, que fue el primer lanzamiento y a modo de ver de Santa Rosa, define el disco, porque cuenta con energía y sabor, de otra parte está acompañado por Tito Nieves, a quien considera su familia.
El mundo de la salsa
Al tener una carrera de más de cuatro décadas y que se sustenta en nuevos proyectos, Gilberto Santa Rosa es un artista que puede hacer su apreciación sobre el futuro de la salsa. Al respecto advierte que percibe un gran interés por parte de la juventud, y a la vez el género necesita de ellos para poder trascender los próximos años, y si a esto se le suma talento, todo está asegurado.
El boricua es consciente de que el género urbano está dominando actualmente la escena musical, pero es lo que identifica a esta generación, entonces la salsa se defiende con quienes le hacen el seguimiento a los proyectos que surgen cada día y mantienen su interés más allá de otras propuestas.
Gilberto Santa Rosa es muy activo en redes sociales, desde allí hace presentaciones de temas, comentarios y los ya famosos “Martes de colaboraciones”, un espacio que surgió de ese interés de mostrar una serie de colaboraciones que ha logrado en los últimos años con excelentes artistas, pero que muchas veces no tienen la difusión que merecen.
Por allí han pasado temas que cuentan con su versión especial al lado de Enrique Iglesias, Ricardo Montaner, Ricardo Arjona, Miriam Hernández, Maite Hontelé, Isaac Delgado, Ednita Nazario, entre otros que tal vez el público nunca supo o lo habían olvidado. Ese fue un preámbulo para ir calentando el ambiente y esperar las colaboraciones de “Colegas”.
Tiempo es lo que hay, y Gilberto Santa Rosa lo ha sabido aprovechar, tiene unos proyectos a futuro, que si bien saldrán en 2021, él los trabaja como si se presentaran ahora; confiesa que le hace falta el afán de los conciertos y las giras, sin embargo ha disfrutado la parte buena de estar en casa.
Y si de pendientes se trata, indica que se quedó postergada una gira que había empezado en enero, sin embargo espera retomar una vez se empiecen a levantar las restricciones y la realización de conciertos se una a la nueva normalidad.
Gilberto ha tomado su música como una terapia, de allí que ya grabó dos canciones que harán parte de ese nuevo álbum que prepara para el próximo año. Se declara satisfecho con lo que ha podido hacer y cree que serán muy refrescantes cuando las presente.
La vida de este artista va ligada a su carrera, esos 43 años en los escenarios lo llenan de felicidad, comprende que no se equivocó el día que decidió escoger este oficio que le ha permitido vivir no sólo en el aspecto material, sino que le ha dado la oportunidad de conocer a gran parte de sus ídolos, ha aprendido de ellos, trabajar con gente buena y eso es una bendición, por eso se declara satisfecho.




