Ofertas, milagros, belleza a granel, eso es lo que a diario ofrece la publicidad en torno a la estética, un tema que en esta década desencadenó toda suerte de facilidades para lograr una belleza extrema, la misma que se busca a cualquier precio.
No obstante, la falta de control sobre estos contenidos, ha llevado a más de una persona a vivir con secuelas permanentes que recuerden un mal procedimiento a raíz de un producto no aprobado para el organismo humano y en el peor de los casos, a la muerte.
Son pocos los productos de relleno que se encuentran indicados para lograr su cometido estético sin atentar contra la salud, por lo general de utilidad en el rostro para atenuar líneas de expresión y mantener la tan anhelada juventud, como el ácido hialurónico, aplicado en proporciones indicadas por un especialista y teniendo en cuenta la presentación, indica la dermatóloga Ingrid Salas.
Los efectos adversos de un material de relleno no autorizado pueden no aparecer inmediatamente y eso hace que el paciente pierda cuidado y se muestre satisfecho, pero con el correr del tiempo, hasta diez años después, se pueden manifestar complicaciones.
Una de las zonas más expuestas a este tipo de rellenos son los labios, toda vez que se asocia juventud con labios carnosos, además de seguir con el prototipo de las actrices más destacadas del momento.
Tener en cuenta el tipo de rostro y las facciones, es fundamental antes de acceder a estos procedimientos, pero lo más importante, es verificar la calidad y certificación del relleno utilizado, indica la doctora Salas.
Dar volumen a los labios con un material permitido, es reversible en el tiempo, de tal manera que si su aplicación no fue muy profesional, basta esperar a que desaparezca su efecto y todo quedará como antes.
Los materiales permanentes son más atractivos para muchas personas, debido a su bajo precio y con la convicción de que será una inversión para toda la vida. Estos son rechazados por el organismo, producen inflamación y deformidades, en ocasiones es tan severa la lucha del organismo, que termina en infección.
Materiales no aprobados
Todos estos productos carecen de permiso y registro sanitario lo que es motivo suficiente de alarma y en consecuencia, causa para ser investigados por las autoridades de salud.
Biopolímeros
El uso de este material ya es considerado un problema de salud pública. Bajo la falsa calificación de ácido hialurónico, se aplica en glúteos, senos, arrugas y labios, produciendo a largo plazo reacciones granulomatosas al adherirse a los tejidos, de tal manera que es imposible extraerlos del cuerpo.
Su gravedad es tal, que puede dañar el drenaje linfático y hasta llevar a la amputación del área tratada.
Silicona líquida
Es muy importante distinguir la silicona líquida de las prótesis de gel de silicona. La diferencia es sustancial: la primera está totalmente prohibida por ser la causante de todas las famosas complicaciones que deforman cuerpos y dañan la salud. Las prótesis, en cambio, han alcanzado un alto grado de calidad y satisfacción entre las personas operadas.
La silicona en cirugía estética sólo debe referirse a prótesis rellenas con gel de silicona, las cuales son utilizadas en pecho o glúteos, teniendo como ventaja principal una larga duración y que se pueden retirar, porque no se trata de una infiltración.
La silicona líquida es una sustancia que ha demostrado ser peligrosa y puede producir siliconomas, que se extienden por todo el cuerpo causando deformaciones y otras complicaciones.
Polimetilmetacrilato
Este compuesto es un agente potencialmente tóxico que puede inducir alteraciones graves de tipo hemodinámico (hipotensión, bradicardia, asistolia) o broncoespasmo. Recientemente se ha empleado en procedimientos estéticos no quirúrgicos, para el relleno de tejidos blandos en forma inyectable, también se usa para suavizar las arrugas, aumentar volumen y resaltar el contorno corporal.
Entre los efectos secundarios reportados se describen reacciones dérmicas, como lesiones granulomatosas, inflamación crónica, infección, necrosis facial, y en un caso, reporte de ceguera asociado a su empleo facial.
Polialquilimida
Los rellenos cosméticos conocidos como implantes de polialquilimida podrían causar efectos secundarios. Estos implantes, que son elaborados con gel y agua, se emplean en procedimientos cosméticos para corregir defectos faciales en los labios, mejilla, frente y en los pliegues nasolabiales, pueden dejar la piel susceptible a las infecciones.
