Al género del terror en el cine le pasa lo que le pasa a todos los géneros que han tenido que reinventarse y mirar cómo se resisten a desaparecer dentro de la industria cinematográfica.
A través de los años el cine de terror ha recurrido a todo lo “inhumanamente” posible para despertar pánico en el espectador. En el desarrollo de su historia se ha acudido a los vampiros y todo lo que se desprende de ahí; muñecos satánicos, plagas de insectos, tiburones, zombis, niños asesinos, ancianos, fantasmas, monstruos, e historias inspiradas muchas de ellas en nuestras pesadillas y todo lo que pasa por la mente humana y produzca susto.
Cada vez se hace más difícil encontrar una cinta de “miedo” que verdaderamente produzca su objetivo: que el espectador amante de este género se aferre a la butaca y sea capaz de resistir a las sorpresas; es raro ver por estos tiempos, filmes donde se mezclen acertada y originalmente todos esos elementos claves dentro de este estilo de producciones.
Por estos días está en nuestra cartelera de cine la película “Mamá”, la historia de dos niñas que son rescatadas un tiempo después del asesinato de su madre. Su tío Lucas (Nikolaj Coster-Waldau) y su novia Annabel (Jessica Chastain), las han estado buscando angustiosamente. La vida que ellas llevan, a partir del momento en que las encuentran, empieza a rodearse de una atmósfera de silencios, giros argumentales y con la presencia de alguien que las está acompañando misteriosamente.
Imágenes escalofriantes, historias impactantes, y desconciertos hacen de esta cinta un filme con muchos elementos típicos de este cine pero que no terminan de convencer y no logran cumplir acertadamente el cometido natural del género. “Mamá” es un filme que ha generado un interés mayor por la presencia de uno de sus productores más que por su joven director, Andrés Muschietti o cualquiera de sus actores. La cinta, producida por J. Miles Dale, Bárbara Muschietti y Guillermo del Toro sorpresivamente estuvo entre las más taquilleras en los Estados Unidos durante la semana de su estreno.
Del Toro, un destacado director, guionista y productor mexicano que tiene dentro de su filmografía cintas como “El espinazo del diablo”, “El laberinto del fauno”, “Asesino en serio” y “El orfanato”, entre otras, es sin lugar a dudas quien le aporta los elementos reiterativos y que ya hemos visto en sus anteriores producciones: no son gratuitas la presencia de las niñas, las atmósferas lúgubres, las pesadillas y fantasías en esta película que intenta ser original pero que al final no es mucho lo que nos sorprende.
