Es improbable que desconozcamos los momentos irrepetibles que nos ofrece la infancia; momentos que nos dejan una marca imborrable en nuestra historia como personas, porque durante esos momentos memorables practicamos nuestra principal ocupación de niños: jugar.
El juego con objetos o juegos de construcción junto con el juego dramático o juego de roles, resultan ser los más característicos en los Centros Infantiles.
El juego con objetos o juegos de construcción ocasionan la adquisición de hábitos que ayudan el cuidado de sí mismo, de los otros y del ambiente; alcanzar el conocimiento que los objetos están fabricados con diferentes materiales y que estos materiales pueden sufrir distintos tipos de cambios; descubrir que las cosas se organizan de acuerdo a las cualidades y características del material (rompible o no, liviano o no, si flotan, si encajan con otros, etc.) a través de manipular, explorar, probar las texturas, sabores, temperatura, tamaños y formas.
El juego de roles o juego dramático (jugar a la mamá, asumir un personaje, a los bomberos, carpinteros, etc.); tiene como base la experiencia de los niños y las posibilidades que tienen de concebir, de construir una realidad imaginada donde radican una serie de acciones personales de los roles que asumen.
Este tipo de juegos favorece la comunicación y expresión a través de los diversos lenguajes verbales y no verbales; promueve la alfabetización inicial al reconocer el valor del lenguaje en la adquisición de conocimiento; hace realidad la producción teatral, corporal, musical, plástica en los niños; abren la oportunidad de alcanzar al mundo y actuar en él desde otra lógica. Así mismo, el juego dramático o de roles juega un papel importante en la formación de pensamiento y en la actividad reflexiva.
Estas particularidades nos llevan a preguntarnos ¿cómo potenciar en el Centro de educación Infantil, la capacidad que tienen los niños de jugar simbólicamente y aprender? Proporcionándoles múltiples y diversas experiencias de segmentos del mundo para que sean recreadas y exploradas en el juego. Generando oportunidades de acceso a espacios de aprendizaje y tener claro la importancia de hacer visible los juegos, los modos de proponerlos, diseñando ambientes que inviten, que provoquen la aparición de diversos tipos de juego que, al confluir unos con otros, enriquezcan y sostengan la propuesta lúdica. Ambientes, espacios, donde cuenten con tiempo y continuidad, porque el juego es uno de los aspectos que definen una Educación Inicial de calidad.
*Coordinadora Nacional de Preescolares Aspaen
BIBLIOGRAFÍA:
González Moreno, C. X.; Solovieva, Y & Quintanar, R. L. (2011) Actividad Reflexiva en Preescolares: perspectivas psicológicas y educativas. UniversitasPsychologica, 10 (2), 423-440
Sarlé, P. & Col. Juego con objetos y juego de construcción. El Juego en el Nivel Inicial. Propuestas de Enseñanzas. Edición: Damián Atadía y Verona Batiuk. Buenos Aires 2010
Sarlé, P. & Col. Juego Dramático. El Juego en el Nivel Inicial. Propuestas de Enseñanzas. Edición Verona Batiuk y Damián Atadía. Buenos Aires 2010
Sarlé, P. Juego y Educación Inicial. 1ª ed. Buenos Aires: Ministerio de la Educación
