En el corazón del barrio San Diego, en el Centro Histórico de Cartagena de Indias, se esconde una calle que aún conserva el alma colonial de la ciudad: la Calle de Quero. Su arquitectura colorida, sus balcones adornados con flores y su atmósfera tranquila la convierten en un destino perfecto para quienes desean alejarse y conocer la esencia misma de la ciudad desde la tranquilidad de recorrer sus calles más icónicas, cada una, que alberga una historia de las hazañas vividas en este lugar.
En tiempos de la Colonia, esta vía era conocida como la Calle de Nuestra Señora de Valencia. Con el paso de los años, su nombre cambió, pero su encanto perdura intacto. A diferencia de calles más transitadas como la Calle de la Moneda o la Calle del Arzobispado, esta calle ofrece un recorrido más sereno, donde los sonidos de la ciudad parecen atenuarse, permitiendo disfrutar con calma de cada detalle arquitectónico. Lee también: Estas son las calles más ‘instagrameables’ de Cartagena según la IA.
Sus casas de colores, sus puertas de madera con aldabas talladas y sus balcones coloniales repletos de buganvillas y geranios crean una postal perfecta de la Cartagena amurallada. Caminar por esta calle es hacer un viaje en el tiempo, evocando las épocas en las que carruajes y comerciantes recorrían sus adoquines.

Un recorrido para aquellos que buscan conocer desde la tranquilidad
La Calle del Quero es un lugar ideal para quienes buscan conocer una Cartagena de Indias más pausada y auténtica. A diferencia de otras calles más comerciales, aquí no encontrarás grandes almacenes ni discotecas. En su lugar, pequeños hoteles boutique, cafés escondidos y galerías de arte brindan un ambiente exclusivo y acogedor.
Este rincón del barrio San Diego es perfecto para un paseo relajado, ideal para aquellos que disfrutan de la fotografía. La luz del atardecer resalta los tonos cálidos de las fachadas, creando un escenario inigualable para capturar la esencia colonial de la ciudad.
Además, su ubicación estratégica permite acceder fácilmente a otros puntos del barrio, como la Plaza de San Diego, y todos los restaurantes que se encuentran desplegados en la zona.
Por esto, si buscas vivir la experiencia de una Cartagena más íntima, lejos del ajetreo de las zonas más turísticas, esta es una parada obligatoria. Ya sea para una caminata tranquila, una sesión de fotos o simplemente para deleitarte con la belleza de su arquitectura.

Dato curioso de la Calle del Quero
Según cuenta la leyenda, en el lugar hay una casa tenebrosa en la cual vivió un señor llamado Miguel Cuero, este personaje resolvió un día cambiarse el apellido a Quero, puesto que a su madre antes la llamaban “cuero de gato curtido” y esto le causaba vergüenza.
Este señor dedicado a cuidar sus preciados tesoros, una noche escuchó ruidos en su casa y acudió a ver qué pasaba. Llegó hasta el baúl donde guardaba sus pertenencias y comenzó a contar todas las piezas, una por una. En ese proceso, la tapa del baúl le cayó encima y le quitó la vida. Cuando el cuerpo se descompuso, los vecinos se dieron cuenta. De ese relato se supone que nace el nombre de la calle y de las suposiciones de algunas personas que los sonidos extraños emitidos por esta vivienda los ahuyentaron.