Un análisis de la aplicación de citas Gleeden pone en duda la “fidelidad” de muchas personas, especialmente durante un día como hoy, 13 de enero. De acuerdo con Gleeden, plataforma de encuentros extramatrimoniales, este 13 de enero es el día en que la infidelidad alcanza su punto más alto. Este fenómeno, que se repite año tras año, está relacionado con un aumento significativo en la actividad de los usuarios tras las vacaciones navideñas.
En una encuesta realizada a 15.000 usuarios, las razones detrás de este comportamiento incluyen:
La necesidad de escapar tras las tensiones de las fiestas (36%).
- El regreso a la rutina (28%).
- Reflexiones de inicio de año (23%).
- La depresión de enero (18%).
- La influencia de las redes sociales (14%).
Por ejemplo, el lunes 10 de enero de 2022 registró un incremento del 490% en nuevos usuarios, mientras que el lunes 9 de enero de 2023 alcanzó un 410%. En 2024, el lunes 15 de enero marcó un nuevo récord con un aumento del 510%.
Estas cifras sugieren que en 2025 la tendencia continuará, consolidando a enero como el mes más activo para quienes buscan aventuras fuera de su relación.

¿Qué tan fieles son los colombianos?
En Colombia, este fenómeno no pasa desapercibido. Según los datos de Gleeden, 6 de cada 10 colombianos admiten haber sido infieles en algún momento. Además, el 49% considera que la infidelidad es natural hasta cierto punto, aunque las mujeres siguen siendo más castigadas socialmente por este comportamiento.
Estos resultados evidencian cómo el contexto emocional y social del inicio de año influye en las relaciones personales. Aunque la infidelidad sigue siendo un tema controversial, factores como la rutina, las redes sociales y las expectativas sociales desempeñan un papel clave en su auge durante enero.
¿Por qué suceden las infidelidades?
Los expertos de la Clínica Mayo explican que la infidelidad puede ocurrir en todos los tipos de matrimonio. Esto incluye a aquellos que parecen felices y a los que atraviesan muchos problemas. La infidelidad puede ocurrir debido a diversos factores, incluidos los siguientes:
- Falta de afecto.
- Pérdida de cariño, amor y cuidado mutuo.
- Falta de compromiso con la relación.
- Problemas de comunicación sobre las necesidades emocionales y de la pareja.
- Baja autoestima.
- Problemas de salud física, como dolor crónico o discapacidad.
- Problemas de salud mental, como depresión o ansiedad.
- Adicciones, como al alcohol, las relaciones sexuales, el romance o las sustancias adictivas.
- Problemas matrimoniales no resueltos, como el miedo a la intimidad o evitar conflictos.
- Cambios importantes de la vida, como tener un hijo o que este se vaya del hogar.
- Períodos de estrés, como cuando los cónyuges deben estar separados durante un largo tiempo.