¿Recuerda la página web “SexSi o SexNo”? para los que no, era un portal donde usuarios podían crear un perfil y ser calificados por personas completamente anónimas y así determinar niveles de atracción según las fotos que se subían al portal.
Tinder es una aplicación que cumple más o menos esa función y restringe las calificaciones en un rango de ubicación cercano. Es decir que el usuario califica personas que estén dentro de un radio determinado usando la misma aplicación.
Además, las calificaciones son completamente anónimas hasta que alguna persona coincida contigo en una calificación positiva mutua. Es decir si alguien te califica bien y tu también calificas bien a esa persona, inmediatamente se crea un contacto visible en la aplicación desde donde se pueden iniciar conversaciones de chat.
En resumen, Tinder descubre qué persona cercana ha indicado que le gustas y los conecta si ambos están interesados. De esta manera se crea una red social de citas, ligera que se puede llevar en el bolsillo y además aumenta las probabilidades de un encuentro personal debido a que solo aparecen fotos para calificar si esta cerca de esos usuarios.
En la aplicación se puede crear una cuenta o iniciar sesión con Facebook y además configurarla para ampliar el rango de búsqueda o cambiar preferencia de género entre otras opciones.
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