El principal tema de discusión durante AndinaLink 2016 que se desarrolló en Cartagena la semana pasada fue la convergencia y la asimetría regulatoria que hay entre OTT’s (servicios Over The Top) como Netflix, Fox Play, HBO Go entre otras y operadores con servicios comparables tales como Claro Video, Movistar video y DirectTv Play.
El contexto
Según la Comisión de Regulación de Comunicaciones de Colombia, apenas el 2.5% de las personas consumen contenidos de televisión a través de internet, mientras que el 25.2% lo hace en conjunto con los servicios tradicionales. Netflix, por ejemplo, suma más de medio millón de suscriptores en Colombia.
La televisión y servicios de telecomunicaciones hacen inversiones en infraestructura y aportan al Fondo de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Fontic) entre otras regulaciones en las que intervienen hasta 8 entidades del estado. Por otra parte, muchos OTT ni siquiera tienen oficina en Colombia y no pagan impuestos.
Esto refleja un desbalance en el mercado en el que los proveedores de servicios OTT son los que llevan las de ganar utilizando redes en las que otros han invertido llevando servicios de alto valor agregado mientras que los operadores quedan asfixiados en carga y competiendo fieramente entre sí en los mercados.
Según datos presentados por Ángela Guerra, directora de regulación de Telefónica, mientras entre 2011 y 2014 la televisión tuvo una tasa anual de crecimiento de usuarios del 8%, la de Netflix fue del 128% que hoy tiene un poco más de 700.000 afiliados en el territorio nacional.
¿Qué hacer?
Sin embargo, el gran dilema radica en como balancear la ecuación. La primera opción sería atribuirle las mismas cargas tributarias y regulatorias a las OTT lo que estrangularía el mercado y perjudicaría en gran medida la competencia y al usuario final. La segunda opción sería reducir las cargas a los operadores igualándolas a las OTT lo que significaría un suicidio para el financiamiento de la TV pública, así como el desarrollo e inversión de la infraestructura en Colombia.
La opción más justa, y a la que seguramente estarán apuntando las mesas de trabajo en Cartagena, es establecer un punto medio de cargas tributarias y regulatorias y aplicarlas tanto a las figuras de OTT y operadores. De esta manera, se alivia un poco las altas exigencias a operadores y Colombia empezaría a percibir ganancias e impuestos de las OTT abriendo un mercado competitivo más justo.
El problema de la figura
La convergencia es un concepto cuya filosofía se basa en la unificación de tecnologías y que el usuario pueda acceder a los contenidos sin importar el dispositivo o medio que esté usando.
Entonces, las OTT entraron a Colombia con una figura completamente nueva en una legislación nacional anticuada, que como siempre nunca ha considerado las TIC, y se acomodó lo mejor que pudo en la posición ventajosa que hoy tienen. (Lea aquí: No basta con reglamentar Uber)
Entonces es imposible culpar a las OTT de “aprovecharse” porque simplemente pasa lo mismo que pasó con el caso de Uber, si hay hueco legal hay espacio para todo.
Ante la revolución de las OTT, los operadores, naturalmente, empezaron a desarrollar servicios comparables a las OTT con el objetivo de no dejar ir a sus clientes. Es así como nacieron los servicios de valor agregado de las operadoras nacionales tales como Claro Video, Movistar Video y DirecTv Play.
Estos servicios convirtieron a los operadores en OTT pero con responsabilidades mucho mayores frente a servicios como Netflix que ofrecen su contenido exclusivamente en internet.
Es así como se deben realizar algunos ajustes y claridades a las fronteras entre OTT y operadores. Una vez definida las figuras será mucho más fácil legislar teniendo clara las delimitaciones, alcances, responsabilidades y deberes de los títulos asignados.
Lo que dicen los operadores
La voz generalizada de los operadores a nivel nacional es un llamado al gobierno para que nivele las cargas y exista un mercado de participación que contribuya a un ambiente competitivo, sin tantas restricciones, pero con las suficientes para que el país perciba beneficios y proteja a los consumidores colombianos.
Para Claro la competencia siempre es bienvenida. Lo importante para este operador es garantizar que haya reglas de juego claras y que la aplicación de la regulación sea equilibrada para todos.
“Entendemos que la tecnología avanza y hay nuevas formas de ver televisión. En Claro somos conscientes de esa dinámica y sabemos los usuarios quieren ver “lo que quieren, cuando quieren y donde quieren y para eso tenemos nuestro centro de entretenimiento llamado Claro Video.”, explica el operador a través de un comunicado.
Por otra parte, DirecTv afirma a través de un vocero que "Lo que está pidiendo es que se eliminen las asimetrías entre productos comparables que hoy funcionan en desigualdad de condiciones. DirecTv Play factura y transfiere IVA, mientras que otras plataformas no lo hacen."
Lo que dicen las OTT
Las OTT están de acuerdo en que se debe instaurar un nuevo modelo de regulación porque además favorece la pelea frente a su gran Némesis (y competencia): la piratería en internet.
Organizaciones como Fox Networks (quienes tienen su OTT Fox Play) reconocen que un nuevo marco regulatorio debe reconocer las nuevas realidades de este mercado.
En un comunicado afirmaron que "FOX Networks Group (FNG) Latin America, hace público en Colombia su respaldo a todos los esfuerzos que realice la Autoridad Nacional de Televisión – ANTV para depurar y regularizar la industria de la TV paga en el país."
Se estima que las pérdidas anuales ocasionadas por amenazas como la piratería y el sub-reportaje son millonarias y afectan directa y sistemáticamente el crecimiento de la industria.
"Estamos apoyando e invitando a todos los actores de la industria a sumarse a iniciativas como las que plantea la ANTV y emitir un mismo mensaje enfocado a erradicar estos flagelos, no solo del territorio colombiano, sino de toda la región de Latinoamérica.”, dijo un vocero de Fox Latinoamérica.
Lo que dice el gobierno
Para el ministro TIC, David Luna esta conversación entre todos los actores es importante y no duda en reconocer que la legislación colombiana es ineficiente frente a realidades tecnológicas como la bonanza digital que vive el país.
“La tecnología va mucho más rápido que la legislación y nosotros tenemos una legislación absolutamente anticuada, motivo por el cual los llamados de atención que está haciendo la industria son justos, necesarios y oportunos”, dijo el ministro TIC en entrevista con El Universal.
Es por esto que en Cartagena se hizo una convocatoria y se desarrollaron mesas de trabajo para construir entre todos los actores una política pública que mejore las condiciones desde el punto de vista reglamentario y legal.
“Es fundamental pensar en la televisión como servicio, como industria y establecer qué modelo de televisión queremos con su respectivo análisis de institucionalidad”, explica Luna.
En estas mesas de trabajo es donde se debe definir si se quiere el mismo régimen de contraprestaciones y concesiones con el que nació la televisión o por el contrario se implementará otro modelo que no pierda de vista la televisión pública y su infraestructura.
Conclusión
Así las cosas y teniendo en cuenta que todos los frentes tienen una buena disposición para rediseñar y construir un nuevo modelo regulatorio, las cosas pintan bien y se espera que de estas mesas de trabajo resulte una solución que favorezca a los actores, pero por sobre todo a los consumidores colombianos.
