La mayoría de las personas sabe que cuando quieren reducir los niveles de colesterol ‘malo’, el aceite de oliva es aliado incondicional. Pero pocos conocen los resultados de investigaciones hechas a la leche de almendras: que también los disminuye… ¡pero al doble! Así que esta es, por sí sola, una buena razón para que la tomen quienes sufren de triglicéridos y colesterol altos.
Otros buenos motivos son el hecho de que tiene menos calorías que la leche de vaca, que gracias a su efecto saciante nos sirve muy bien como aperitivo cuando estamos siguiendo una dieta para bajar de peso y que es fuente de proteína y de arginina, sustancia última que incide positivamente en la función cardiovascular.
Y por supuesto, uno de sus valores incuestionables: podemos tomarla cuando no podemos consumir leche de vaca, pues le ayuda al sistema digestivo a hacer una digestión menos pesada. Además tiene la misma consistencia que aquella, pero un sabor muy suave, y estas dos características la hacen ideal para aquellas personas a las que nos les gusta el sabor de la de vaca.
MÁS BENEFICIOS
AntigastritisMuchas personas aseguran que después de incluirla en su dieta, los episodios de gastritis o de problemas gastrointestinales disminuyeron en un altísimo porcentaje e incluso desaparecieron.
Para recuperarse…Su alto contenido en potasio la hace aconsejable para tomar después de sufrir episodios de diarrea o vómito, cuando los niveles de este elemento se reducen notablemente. La leche de almendras ayuda a recuperarlos.
VitamínicaAdemás de ser rica en calcio, hierro, zinc y vitaminas A, E y D es totalmente natural y equilibrada.
A favor del colonContiene altos niveles de fibra de tipo insoluble y es por esta razón que protege la pared de los intestinos, especialmente del colon. También ayuda a regular la absorción de los azúcares.
_____________Asesoría: Laboratorios Funat.
