Ver un pastel de bodas, para Ron Ben-Israel, es mirar la historia de la pareja resumida en una pieza comestible.
El chef pastelero israelí visitó por primera vez Cartagena y quedó maravillado.
Siempre está sonriente. La historia de Ron estuvo marcada por la Segunda Guerra Mundial. Su padre, Moshe, perdió parte de su familia en el Holocausto y fue un sobreviviente de los campos de concentración en Auschwitz.
Ron tuvo por varios años una exitosa carrera como bailarín de danza moderna y luego se mudó a Nueva York donde encontró la gloria haciendo pasteles. Fue descubierto por la empresaria Martha Stewart, quien lo impulsó después de ver una de sus fenomenales creaciones a través de una ventana.
Su pastelería especializada en tartas nupciales, Ron Ben-Israel Cakes es hoy una de las más apetecidas de la industria norteamericana. Sus delicados detalles con flores de azúcar y las piezas que utiliza, lo hacen único en su estilo.
Reinvención con estilo clásicoÉl, divertido, sofisticado y perfecto en toda ocasión, disfrutó de las calles de La Heroica, donde encontró la inspiración para sus creaciones futuras. “Fue muy emocionante ver las luces, y los colores tan diferentes que tiene. Las texturas del centro de Cartagena son increíbles, van desde lo frío hasta lo cálido. La arquitectura es muy valiosa y claro las frutas locales, amé la guayaba”, expresó entre risas.
Estuvo como conferencista invitado en el Cartagena Bridal Week 2015 y una de sus ideas luego de conocer nuestra ciudad, es poder trabajar con nuevas parejas locales, a distancia. “Es posible que pueda trabajar con clientes en la ciudad haciendo mis diseños desde Nueva York porque traer pasteles frescos es muy difícil por la distancia y el calor que hace aquí”, explica.
Criado en Tel Aviv afirma que al inicio de su carrera como chef pastelero no le gustaba la forma en que solían ser los pasteles de boda. “En los 90, por ejemplo, la industria era muy estática. Entonces empecé a quitar ciertas cosas y a añadir otras porque había elementos que no tenían que ver o no tenían relación con lo que los novios llevaban puesto, con los adornos del salón, con nada”.
Allí empezó todo. Sus pasteles comienzan con una fuerte inspiración donde se conjugan muchos elementos. “Necesitamos conocer desde la historia de los novios, la época del año en que se conocieron y qué flores hay, hasta el ambiente donde se hará la boda y qué lucirá el novio”, comenta.
En la última edición del Cartagena Bridal Week , Ron Ben-Israel compartió sus ideas para una boda perfecta y prometió volver. “Es la primera vez que vengo, pero te aseguro que no será la última”
Conoce las tradiciones que se fusionan en los fritos cartageneros
TANIA FLÓREZ DECHAMPS





