El cubano habla sin aspavientos pero también con la contundencia que caracteriza a sus canciones.
Amaury Gutiérrez fue uno de los principales invitados musicales de la edición 56 de la Feria de Las Flores. Se trata uno de los herederos del feeling (sentimiento), ese género musical que consagró a su compatriota Pablo Milanés como uno de los mejores intérpretes de Hispanoamérica y que se caracteriza por un estilo, nacido en los años cuarenta, que se acompaña de guitarra, al estilo de los viejos trovadores pero enriquecido por armonizaciones jazzísticas.
No obstante, al contrario de Milanés, Amaury es un disidente recalcitrante frente al régimen cubano pero esa condición no impide que logre establecer una comunicación íntima con el público.
Hace dos años recibió su primer Grammy Latino pero su andadura musical da cuenta de un proceso que se inició desde sus 15 años, cuando influenciado por su madre deliraba por artistas como Paul McCartney, Caetano Veloso, Stevie Wonder y Rubén Blades.
El artista, residenciado hace 10 años en Miami (Estados Unidos), le aceptó una entrevista a El Universal en la cual no pudo dejar de hablar de política, en especial de lo concerniente a su patria cubana y lo que él considera el sentimiento de dolor y nostalgia que todavía le genera “la dictadura de los Castro”.
- ¿Qué momento disfruta más, cuando compone o cuando hace los arreglos de alguna canción?
- Cuando escribo. Eso es lo máximo porque es el momento de la inspiración y del regalo de Dios. No hay momento como ese.
- ¿Recuerda la escena determinante en su infancia que lo impulsó a emprender una carrera musical?
- La escena habrá sido junto a mi madre. Mi mamá fue la que me enseñó la música: la Orquesta Aragón, Los Zafiros. Me enseño Marco Antonio Muñiz y Javier Solís. Yo empecé a escribir tarde, porque en Cuba los ‘chamacos’ empiezan a los 7 años. Yo empecé a los 15, y a los 17 empecé a escribir mis propias canciones.
- ¿De qué están hechas las mejores canciones?
- De amor y de sueños sobre todo.
- ¿Cómo ve a la cuba actual?
- A Cuba la veo con tristeza, con optimismo y con nostalgia. Hace 20 años que no voy. A mí no me deja entrar a Cuba el gobierno comunista. Y no me deja entrar por las cosas que pienso y que digo. Pero hay un Dios…; hay un proverbio en México que dice que no hay mal que dure cien años, pero sí 99. Entonces a nosotros nos ha tocado bailar con la más fea: una dictadura de 54 años. Pero espero que las cosas cambien porque así lo quiere Dios y así lo quiere el pueblo de Cuba, y yo estoy seguro de que las cosas van a cambiar.
- ¿Con Raúl Castro considera que ha cambiado un poco?
- Raúl es un dictador y un asesino igual que Fidel Castro. Los dos son unos asesinos, y Cuba aún tiene que cambiar.
- Usted le dedica una de sus canciones más emblemáticas a los balseros, ¿Recuerda la época de los marielitos?, ¿Será que Raúl está provocando permanentes marielitos a Miami?
- Hay tratados de inmigración a Estados Unidos. Ellos (los hermanos Castro) lo que quieren es que la olla no explote y no explota porque cada cierto tiempo mandan gente para Estados Unidos. Ellos quieren un sistema de odio, de miedo y de terror en Cuba. La gente no aguanta eso. Lo que pasa es que Cuba es una isla. Si no fuera una isla estarían ellos dos solos hablando ahí.
- Sabe de los graves indicadores de desempleo en Cuba, ¿Cómo cree que se ocupe el gobierno?
- Ellos no tienen solución para los problemas acuciantes de Cuba que es un país que no produce, que vive de la esclavitud y del miedo del pueblo. Eso es todo lo que ha pasado durante 54 años. Por algún lado va a explotar la cosa porque es una situación insostenible.
- ¿Cómo definiría en términos sencillos la situación de su país?
- Es una Cuba súper compleja. Es una Cuba en la cual el pueblo está pidiendo cambios a gritos. Lo que pasa es que el pueblo no tiene voz pero la está reclamando y la está tomando poco a poco con los poquísimos espacios que se le otorgan o que no se le otorgan, o que el pueblo se roba. Está esperando y soñando con cambios de verdad y cambios profundos. Tienen que haber elecciones democráticas y los hermanos Castro tienen que abandonar el poder.
- ¿Pero cómo pasar del sueño a la realidad, que tiene que pasar?
- Va a costar sangre y va a costar muertos. La libertad cuesta sangre, eso el pueblo colombiano lo sabe. La libertad nadie te la va a regalar, los espacios hay que tomarlos, hay que robárselos sobre todo en una dictadura comunista que no te da nada. O sea ellos tienen el poder absoluto, el monopolio de los medios de comunicación, y los opositores no tienen acceso a estos canales ni el pueblo tampoco.
- ¿Qué importancia tienen las letras de denuncia social?
- Mira, mis canciones hablan de amor sobre todo. Yo cuando hablo soy más político y más cuando me preguntan de Cuba porque es una cosa que me duele en el alma sobre todo por cómo están las cosas desde hace tanto tiempo. Pero la música mía es romántica aunque hay canciones como ‘Balsero’ que hablan de una realidad de Cuba que está de frente y que no se puede ignorar. Pero mi música es especialmente romántica. Yo soy un trovador de Cuba y la trova ha sido romántica por excelencia casi siempre.
- ¿Cuál es la diferencia entre la música que se hacía en Cuba en los años 60 y la que hace usted ahora?
- La diferencia es profunda y abismal. La Nueva Trova se vendió al gobierno cubano. La generación mía no, y las generaciones que vinieron después tampoco. Un artista tiene que ser subversivo y tiene que ser crítico de la realidad y enemigo del gobierno. Y al nueva trova se sumó al gobierno.
- ¿Cuál es la participación de Silvio Rodríguez y Pablo Milanés en ese gobierno?
- Mi hermano, cuando tú eres millonario no te importa nada, maestro. Ellos viven como príncipes y el pueblo se está muriendo de hambre. La Nueva Trova se vendió. No me refiero a la trova sino a la Nueva Trova porque la anterior a ellos es una música de tradición y de toda la vida.
- ¿Y cuáles considera usted que son los padres de esa trova?
Sindo Garay, Manuel Corona, José Antonio Méndez, Cesar Portillo de la luz, Miguel Matamoros…;
- ¿Cree que Cuba es el mejor escenario para hablar de la paz de Colombia?
- Claro que no. La guerrilla que tiene azotado al pueblo colombiano entrenó en Cuba. A mí me parece una ironía. Yo soy de Uribe, con todo respeto, no quiero opinar de Colombia porque soy cubano y no me corresponde…;
- ¿Por qué cree que los cubanos tienen tanta vocación artística?
- Es parecido a Colombia. Son pueblos que tienen mucha tradición de la música popular, de poesía. La música en Cuba es importante para la gente, igual que aquí. Y hay una gran tradición de la música popular y muchas escuelas de música y de toda la vida ha sido así.
- ¿Hace cuánto no viene a Cartagena?
- Hace 2 años que no voy pero es una de las ciudades más lindas del Caribe y del mundo. Es impresionante, me gusta recorrer las calles y me gusta mucho la noche. Me recuerda mucho a Cuba.
- ¿Cuál es su paraíso personal?
- Mi casa, mi familia. Ese es el paraíso personal de cada quien. Yo sin eso no soy nada, sin eso no escribiría canciones ni sería nadie. Vivo hace 10 años en Miami, viví 29 en Cuba y 11 en México. No saques la cuenta (ríe).
- ¿En qué proyecto está trabajando ahora?
- Estoy haciendo un nuevo disco de manera independiente. Yo estuve mucho tiempo trabajando con una compañía discográfica que no voy a decir el nombre. Pero ahora soy artista independiente y voy a sacar un sencillo en unos días en iTunes. Va a salir en Colombia también y estoy muy contento con lo que estoy haciendo y disfrutando mi libertad.
- ¿Cómo ve la música que se hace hoy?
- El panorama de ha cambiado sobre todo la forma en que se distribuye y en que se consume la música. Lo que está ocurriendo es una revolución a nivel tecnológico. Quizá no a nivel artístico porque yo creo que hay una crisis y una carencia tremenda de buenas canciones y de buenas letras, pero es sólo un momento y la música siempre es necesaria para la gente. El mundo no puede vivir sin ella.
- ¿Se visualiza cantando o componiendo reguetón?
- Por supuesto que no.

