comscore
Revista dominical

Estampas de travestis en Arjona

Compartir

No están lejanos los días en que Brigitte decidió que definitivamente se transformaría en mujer. No le preocupó la tiesura de los nombres que empezó a llevar a cuestas desde la pila del bautismo.

Le importó poco si sus abuelos querían que se llamara Tiburcio,  Feliciano o Desiderio. Se erigió como Brigitte, cosa que asumió como la primera cirugía transformista de su vida. O eso cree. A veces piensa que eso que llaman presión social, las burlas o las discriminaciones tuvieron algo que ver. Pero también tiene claro que desde que fue un ¿niño? de escasos años, sus pensamientos, su voz, su forma de hablar, sus maneras de desplazarse apuntaron a soltar las compuertas de ese río represado que era su espíritu. Espíritu que en otras existencias fue mujer sufrida y que pidió a las divinidades un cuerpo de hombre que le ayudara a contrarrestar los padecimientos de siglos pretéritos. Pero el espíritu terminó por imponerse.

No hubo padres ni hermanos malquerientes, no hubo violaciones, no hubo soledades en alguna casa gobernada por mujeres. Nada de eso. Brigitte no cree en especulaciones científicas de mercachifles ilustrados. Tiene claro que sus ganas de alargarse el cabello, de reducirse el mentón y la cintura y de hacer que sus pechos y nalgas crecieran es única y exclusivamente su decisión. Contó con la fortuna del apoyo familiar. Nunca le negaron una moneda para visitar especialistas. Siempre le ayudaron a perforar su cuerpo con soluciones hormonales que le fueron cambiando la voz y las maneras.

Formidable suerte la de Brigitte: casi recién nacida, ya traía los signos de la feminidad en las facciones y en la silueta volátil que, más temprano que tarde, sus condiscípulos escolares aprendieron a percibir y nunca a denostar cuando la veían vestida de niño, pero con aura de niña. Tremenda suerte, Brigitte.

Tú, que a veces sientes lástima por aquellas mariposas oscuras que organizan reinados estrafalarios en las barriadas misérrimas de tu ciudad. Tú, que nunca señalas lo grotesco de aquellos rostros ordinarios, empapados de pinturas que no logran arrasar del todo los crueles trazos de la masculinidad. Tú, que jamás tuviste la necesidad de comerciar con tu cuerpo para juntar los chelines que exigen los cirujanos transformadores de cuerpos y escultores de feminidades. Pero la vida suele ser  más dura que simple. No siempre se tiene la ventura de nacer en buenos pastos, aunque a veces se puede sacar partido de un cuerpo dócil y ponerle categoría a la compra venta sexual. De ese modo, no siempre habría que pararse en las esquinas del arrabal y tener como clientes a lo más sórdido de la hombrería callejera. Y es precisamente allí cuando la candela inclemente de la putería se ensaña contra los menos afortunados. En vez de elogios, menosprecio. En lugar de caricias, agresiones. Y antes que una buena paga, fragmentos de monedas que brillan a mezquindad. Lo tuyo ha sido otra cosa, Brigitte. Por seguir cargando el rostro, el cuerpo y los modales de todas las mujeres que fuiste en otras vidas, tu buena estrella te ha permitido codearte con lo más granado de eso que llaman las mentes abiertas. No han sido pocas las coronaciones y los enamoramientos que adornan tus sendas desde el dichoso y no tan lejano momento en que decidiste que volverías por tus fueros. No a ser la mujer estoica que condenaron las divinidades, pero mucho menos la transformista irredenta a la que le apuestan poco en los parajes de la pobrería popular. No faltaba más.

Tu solo nombre hace presentir la jerarquía que te acompaña con tanta seguridad que a veces hasta se te olvida la existencia de ese animal anestesiado que cuelga allá en lo más íntimo de tu ser.

El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
El libro muestra seis estampas de travestis del municipio de Arjona. CORTESÍA Édgar Garcés.
Únete a nuestro canal de WhatsApp
Reciba noticias de EU en Google News