Como un acto de intolerancia calificaron sus compañeros la agresión de la que fue víctima un conductor de la empresa Sobusa que fue agredido por un vendedor estacionario del barrio Centro de Barranquilla porque le rozaron la chaza donde vende prendas de vestir.
El hecho se registró a las 3:00 de la tarde del martes 11 de noviembre en la carrera 44 entre las calles 36 y 37 del Centro de la capital del Atlántico.
“Los pasajeros informaron que él tropezó una chaza y los manes de la chaza, lo cascarón a él. Es una chaza que sobresalía, que está torcida, y eso causó que esa gente actuara de esa manera. Varios pasajeros que iban con él, comentaron que los sujetos le pegaron un tubazo por la parte de atrás y lo hicieron convulsionar”, narró un conductor a Emisora Atlántico de Barranquilla.
John Jairo Ospina, jefe de ruta de la empresa Sobusa, no dudó en manifestar que este hecho se trata de un acto de intolerancia. “La buseta viene pasando y por alguna situación como que tropezó una de las chazas que están allí. Fue como que tumbó parte de la mercancía, tropezó unas camisetas o algo así, y el conductor se bajó a hablar con el señor, ayudarlo a subir la mercancía y demás. Y ahí se fueron a palabras”.
“El conductor se sube al carro para tratar de mover el vehículo y el dueño de la chaza se sube y le revienta los vidrios inmediatamente y después se suben al carro él y otros sujetos y le dan golpiza al conductor”.
Jefe de ruta de la empresa Sobusa.
En su relato a Emisora Atlántico dijo que el conductor está mal herido. “Se encuentra en un centro asistencial recibiendo atención médica, debido a los golpes y las puñaladas que recibió por parte de estas personas, que actuaron mal porque no se puede tomar por la mano este tipo de acciones”. Lea aquí: ¡Macabro hallazgo! Encuentran sin vida a hombre en un arroyo de Malambo
El conductor recibió un golpe en la cabeza que lo hizo convulsionar
“La herida que recibió en la cabeza fue brutal, fue fuerte. Bien lo describe el compañero, pues el golpe lo desconectó, lo dejó completamente noqueado y empezó a convulsionar en el piso del vehículo. Fue un golpe brutal y fue a mansalva, fue él por la espalda, al conductor que lo atacaron, con un arma contundente que le pasaron a este sujeto que al parecer es el encargado de este puesto ambulante en el centro”, confirmó John Jairo Ospina, jefe de ruta de la empresa Sobusa.
Dijo que el tubo se lo pasaron por la ventanilla, “al parecer un tubo metálico, y lo descargó en la cabeza del conductor, creándole una lección de consideración”.
“Lo que pasó ayer de verdad es una situación que escaló porque ni siquiera hubo un daño físico a esta chaza, sino que son personas intolerantes. Eso es un hecho 100% de intolerancia y que aprovecharon algunos vándalos disfrazados de comerciantes para agredir el vehículo, agredir al conductor, robar pertenencias y crear caos, porque eso fue un caos en el Centro de ayer. Si no hubiese sido por la intervención de la Policía Nacional, que llegó a los pocos minutos de iniciado esto, eso quién sabe en qué hubiese terminado”, enfatizó.
Insistió en que ese acto que se registró ayer martes es algo que no debió darse. “Las personas que están en el Centro, de verdad, este comentario es muy personal, deben cuidar la imagen del Centro. Ellos son las personas llamadas a que deben cuidar la imagen del Centro. El centro sabemos que es un sitio seguro, porque eso lo sabemos. Y lo sabe la Policía Nacional, es un sitio seguro, no te van a robar ni nada. pero situaciones como esta de verdad desdibujan completamente lo que es el comerciante de bien del Centro”.
Manifestó que el conductor es una persona que sale todos los días a trabajar, a prestar un servicio público; no son delincuentes, son padres de familia, son personas de bien que salen a prestar un servicio y un servicio esencial, como lo es el transporte público. Siga leyendo: Marelvis, la habitante de calle que se ahogó en un arroyo de Barranquilla
“Nosotros salimos a mover la ciudad, a hacer patria, no hacerle daño a la gente y el llamado que hacemos es que haya tolerancia, que hay armonía, que no se agreda a la gente unas a otras y que situaciones como esta no se repitan. Y dos, a las autoridades para que tomen las medidas que tengan que tomar para recuperar el espacio público, que ya lo había recuperado en años anteriores, donde ya habían sido reubicados estos vendedores ambulantes y nuevamente se están tomando la vía”, terminó diciendo el jefe de ruta de la empresa Sobusa.