Como Yonaiker Antonio Mejía Castro, de 25 años, fue identificado el hombre asesinado por sicarios, en la noche del reciente domingo 9 de noviembre, en el sector Las Américas del barrio Olaya Herrera, en Cartagena.
La Policía Metropolitana confirmó que el acto sicarial fue reportado a eso de las 11 de la noche, en vía pública. “Según lo manifestado por testigos en el lugar, el hoy occiso fue abordado por dos particulares que se movilizaban a bordo de una motocicleta, donde el parrillero desenfunda un arma de fuego y lo lesiona”, explicó la institución.

Añadió que “la víctima, quien fue impactada en varias oportunidades, tenía una anotación judicial por el delito de abuzo de confianza. Realizó la inspección técnica de cadáver la Seccional de Investigación Criminal de la Policía (Sijín)”.
Tras conocerse la anotación judicial, las autoridades comenzaron a investigar un posible ajuste de cuentas o venganza como móvil del asesinato; sin embargo, no descarta otros motivos. Lea: Este era Jesús Arteaga: acabaron con él por una apuesta de gallos en Cartagena
Sicariatos en Cartagena, leve reducción en las últimas semanas
En La Heroica no asesinaban sicarios desde el pasado miércoles 5 de noviembre, cuando llegaron hasta el sector Mirador de Cartagena, en el barrio Cerro de Albornoz, y le quitaron la vida a Emmanuel Simancas Rodríguez, de 26 años.
Como dato particular de este crimen, que todavía se está investigando, se encuentra que los vecinos del sector informaron que escucharon disparos en la madrugada de ese día, pero el cuerpo sin vida fue hallado en la mañana.

Los asesinatos reportados en los últimos días, según los datos entregados por las autoridades, estarían relacionados con actos de intolerancia. El primero ocurrió en Cerros de Albornoz, donde asesinaron a cuchilladas a Jesús Arteaga, de 19 años, tras una riña en una gallera.
El segundo asesinato fue a bala, en una casa de Nuevo Bosque, donde había una fiesta o integración. La víctima fue identificada como Álvaro Zambrano y uno de los móviles que investigan es un acto de intolerancia por cuestiones pasionales.
