Por solicitud de la Fiscalía General de la Nación, un juez de control de garantías impuso la medida de aseguramiento más severa, privación de la libertad en centro carcelario, contra un hombre en Villavicencio (Meta). El sujeto es señalado como el presunto responsable de agredir sexualmente de manera continuada a su vecina, una menor de edad, en hechos que se habrían extendido entre 2021 y 2025.
Un fiscal de la Seccional Meta fue el encargado de presentar al hombre ante el juez, imputándole un pliego de cargos de extrema gravedad. La Fiscalía le formuló los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años, actos sexuales con menor de 14 años, acceso carnal violento y demanda de explotación sexual comercial con persona menor de 18 años.

Dada la naturaleza de los hechos y la vulnerabilidad de la víctima, todas las conductas fueron imputadas en modalidad agravada. Durante la audiencia de imputación de cargos, el procesado decidió no aceptar su responsabilidad en los hechos que le endilga el ente acusador.
La detención del presunto agresor se logró gracias a una orden de captura que fue materializada por servidores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), quienes contaron con el apoyo de unidades de la Policía Nacional. La captura se llevó a cabo en un sector residencial de la capital del Meta, misma ciudad donde habrían ocurrido los crímenes.
Un calvario de años basado en el engaño y las amenazas
La investigación de la Fiscalía General de la Nación ha revelado detalles escalofriantes sobre el modus operandi del acusado. El calvario para la víctima habría comenzado en junio de 2021, cuando la niña tenía apenas 12 años.
Según el reporte oficial, el procesado presuntamente se aprovechó de la confianza que la familia de la menor había depositado en él, dada su condición de vecino. Se alega que, durante aproximadamente un año, el hombre acudía a la vivienda de la niña en los momentos en que la madre de esta se encontraba trabajando, y era allí donde la sometía a vejámenes sexuales.

La situación escaló de manera aterradora. Después de seis meses de iniciados los abusos, el hombre les propuso a los padres de la víctima que la dejaran ir a vivir con él. Para convencerlos, les habría ofrecido hacerse cargo de su estudio y apoyarla económicamente.
Sin embargo, una vez la menor estuvo bajo su custodia, el procesado presuntamente comenzó a agredirla no solo sexualmente, sino también física y psicológicamente. La investigación señala que la mantenía encerrada en la casa. En ese lugar, la habría accedido carnalmente de forma violenta, utilizando amenazas de atentar contra la vida de los padres de la niña para someterla.
Este infierno, según las autoridades, se prolongó hasta mayo pasado, momento en que la menor logró huir del lugar y buscar ayuda, activando así la ruta de investigación que hoy tiene al hombre tras las rejas.

