En la noche del sábado 25 de octubre, la violencia se apoderó nuevamente de las calles de Bucaramanga. Aldahir Correa Leal, conocido entre los suyos como ‘Pitota’, fue asesinado a bala frente al parque de Los Niños, en un hecho que también dejó dos personas heridas. Su muerte ha causado profundo dolor entre los aficionados del Atlético Bucaramanga, especialmente en la barra Fortaleza Leoparda Sur (FLS), de la que era integrante activo.
De acuerdo con las autoridades, el ataque ocurrió cuando Correa Leal, de 27 años, se movilizaba en una motocicleta Yamaha Nmax, de placas EBD-55G, junto a su compañera sentimental, Luz Nelly Niño Cely, tras salir del estadio Américo Montanini, donde había asistido al encuentro entre el Atlético Bucaramanga y Llaneros. Al desplazarse por la carrera 27 con calle 32, fueron interceptados por otra motocicleta con dos hombres a bordo.
El parrillero, sin mediar palabra, disparó en repetidas ocasiones contra Correa Leal, quien habría sido el objetivo del ataque. Testigos afirmaron que se escucharon al menos diez detonaciones.
Los proyectiles impactaron al joven en el tórax y el antebrazo izquierdo, mientras que su pareja fue alcanzada por una bala en la región lumbar. Ambos quedaron tendidos sobre el pavimento.
Durante el ataque, una transeúnte identificada como Vivian Polet Silva Giraldo, ajena a los hechos, también resultó herida en una pierna al ser alcanzada por una bala perdida.
Aunque ‘Pitota’ fue trasladado de urgencia a un centro asistencial, los médicos no lograron salvarle la vida debido a la gravedad de las heridas. Tanto Luz Nelly como la otra víctima permanecen bajo observación médica y fuera de peligro.
En un comunicado, la Fortaleza Leoparda Sur lamentó profundamente la muerte del joven, a quien describieron como un miembro solidario y entusiasta del grupo barrista.
“Parte uno de nuestros hermanos de cancha, un amigo, un villero de corazón. El alma se nos arruga y el corazón duele, porque sabemos que su partida deja un vacío profundo, pero también una historia llena de amor y orgullo por estos colores”, expresó la barra.
Y agregó: “Aldahir fue más que un compañero de aguante y de tribuna: fue un hermano, un amigo leal, un hombre de corazón noble, de esos que siempre están para sumar, para dar una mano y para hacer sentir que la FLS-1998 es familia”.
Correa Leal solía acompañar al equipo ‘Leopardo’ en sus partidos de local y visitante, y su fallecimiento será recordado entre cánticos y homenajes durante sus honras fúnebres, que se realizan desde este martes 28 de octubre.
La investigación judicial ha revelado otro panorama. Según información del Sistema Penal Oral Acusatorio (Spoa), ‘Pitota’ tenía varias anotaciones por violencia intrafamiliar, lesiones personales y concierto para delinquir con fines de narcotráfico, además de registros por suministro a menor de edad.
El reporte policial también señala que el joven era conocido por la venta de estupefacientes en la zona sur del área metropolitana y que, presuntamente, había recibido amenazas de muerte por parte de un cabecilla de un grupo delincuencial.
Las autoridades avanzan en la recolección de pruebas y videos de seguridad del sector para identificar a los responsables del crimen, mientras en la ciudad se repite una pregunta que duele: ¿por qué mataron a un joven cuya vida giraba entre el fútbol, la pasión barrista y las sombras de la violencia?

