La incertidumbre continúa creciendo entre familiares y allegados de César Argote Ochoa, empleado de una empresa contratista de Cerrejón, quien completa casi un mes completo desaparecido tras ser raptado junto con una camioneta en zona rural del municipio de Uribia, en el norte de La Guajira.
El hecho ocurrió en horas de la tarde del 25 de septiembre, cuando un grupo de trabajadores se desplazaba en caravana por una vía rural del municipio. En medio del trayecto, fueron interceptados por hombres armados, quienes los intimidaron y obligaron a detenerse. Pese a que inicialmente todos fueron retenidos, los delincuentes decidieron llevarse únicamente a Argote Ochoa, quien fue obligado a subir nuevamente a la camioneta, vehículo con el que los captores huyeron con rumbo desconocido.

Desde ese momento, no se ha tenido rastro de su paradero, y las autoridades no han informado sobre avances concretos en la investigación. La familia del trabajador vive días de profunda angustia, aferrada a la esperanza de volver a verlo con vida.
Mientras tanto, amigos, compañeros de trabajo y habitantes de Uribia han expresado su solidaridad con los seres queridos de Argote Ochoa, organizando jornadas de oración y llamados a las autoridades para que se refuercen los esfuerzos de búsqueda.
Otro secuestro similar ocurrió el mismo día en la zona
Cabe recordar que ese mismo 25 de septiembre, en un hecho separado pero también ocurrido en zona rural de Uribia, otro trabajador de una empresa contratista del Grupo Energía de Bogotá fue raptado por hombres armados. Sin embargo, en ese caso la víctima fue liberada días después, lo que alimenta la esperanza de que Argote Ochoa pueda regresar sano y salvo.
Mientras la investigación avanza lentamente, la comunidad guajira continúa exigiendo resultados y clamando por el fin de la incertidumbre que rodea este preocupante caso.

