El barrio Santander, en el noroccidente de Medellín, fue testigo del brutal asesinato de María Fernanda Agudelo Torres, una joven madre de 26 años, reconocida en la comunidad por su dedicación a su hijo y su responsabilidad en el trabajo. El crimen ocurrió en la madrugada del viernes 10 de octubre, dentro de su vivienda ubicada en la carrera 79 con calle 111, en el sector conocido como Los Ranchos.
De acuerdo con la versión de los testigos, el agresor sería su expareja sentimental, un hombre de 45 años conocido en la zona con los alias de Samuel, Chacho o Petra. Según los reportes, el sujeto ingresó a la casa por una ventana, aprovechando la oscuridad de la madrugada, y llegó hasta la habitación donde María Fernanda dormía junto a su hijo.
Al parecer, la joven había decidido poner fin a la relación semanas atrás debido a los comportamientos violentos del hombre, lo que habría desatado una fuerte discusión cuando él la enfrentó nuevamente esa noche.
En medio del altercado, la víctima llamó a su hermano para advertir sobre la presencia del sujeto y pedir ayuda a la Policía. Sin embargo, antes de que llegara la asistencia, el agresor desenfundó un arma de fuego y le disparó en repetidas ocasiones, causándole la muerte de manera inmediata.
Los disparos retumbaron en el callejón del barrio, despertando a los vecinos, quienes salieron alarmados y alcanzaron a ver al hombre huir del lugar caminando rápidamente hacia una motocicleta que tenía estacionada cerca. “Ya te vi, sos vos”, recordó un habitante que le gritó al verlo escapar, sin que el sujeto se detuviera ni respondiera. Testigos señalaron que el homicida vestía una chaqueta oscura y una gorra negra.
Momentos después, asegura El Colombiano, los familiares de la joven ingresaron a la habitación y la encontraron sin signos vitales, con heridas de bala en la cabeza, mientras su hijo pequeño permanecía atónito a su lado.
De acuerdo con allegados, la víctima había terminado la relación tres años después de convivir con su pareja, cansada de sus episodios de agresividad. La semana anterior, María Fernanda había recogido sus pertenencias del lugar donde vivían juntos para comenzar una nueva etapa con su hijo.

Fuentes judiciales confirmaron que el presunto asesino trabajaba en una chatarrería del Centro de Medellín y que sería expendedor de estupefacientes en el sector del Bronx. Además, cuenta con un amplio historial delictivo: violencia intrafamiliar (2023), fuga de presos (2020 y 2013), constreñimiento ilegal (2017) y hurto (2013).
Las autoridades avanzan en su búsqueda y pidieron la colaboración ciudadana para dar con su paradero. Entretanto, la comunidad del barrio Santander exige justicia por el feminicidio de María Fernanda Agudelo, una mujer que, según sus vecinos, “era muy trabajadora, dedicada a su hijo y nunca tuvo problemas con nadie”.