En un golpe contundente contra las estructuras criminales en Colombia, la Policía Nacional, en un esfuerzo conjunto con las autoridades del Reino Unido, ha capturado a José Miguel Muñoz Zúñiga, alias ‘Totoy’.
Este individuo es señalado como el principal coordinador de sicarios del Grupo Armado Organizado (GAO) Clan del Golfo, con injerencia en la región Caribe y Bogotá.
La detención, lograda en Soacha, Cundinamarca, es el resultado de la operación Victoria, enmarcada en la estrategia institucional contra los autores materiales e intelectuales de homicidios a policías.
Un historial criminal marcado por la violencia selectiva
Alias ‘Totoy’ es un eslabón clave dentro de la organización criminal, responsable de planificar y ejecutar múltiples homicidios selectivos. Se le atribuyen al menos cinco asesinatos de alto perfil, incluyendo los de miembros de la fuerza pública, líderes sociales y población civil. Entre los crímenes que se le imputan, destaca el triple homicidio ocurrido el pasado 20 de abril de 2025 en la ciudad de Cartagena específicamente en el corregimiento de Pasacaballos.
En este hecho, fueron asesinados el subintendente Jhon Evangelista Monterroza, el patrullero Andrés Carillo Bayona y el ciudadano Rufino Girado, en un ataque perpetrado con armas de largo alcance.
Además de los crímenes contra la policía, se le vincula directamente con el homicidio de Wilson de Jesús Gaviria Gómez, un líder del programa gubernamental Aguante Popular por la Vida, asesinado el 30 de junio de 2024. También se le acusa del asesinato de Javier Pérez el 22 de enero de 2025, ambos crímenes ocurridos en Cartagena.
Con una orden de captura vigente por los delitos de homicidio agravado, fabricación, tráfico o porte de armas de fuego y concierto para delinquir, la captura de Muñoz Zúñiga representa un hito en la lucha contra la criminalidad organizada. Alias ‘Totoy’ había sido entrenado por el Clan del Golfo en combate urbano y rural, y era experto en el manejo de armas y explosivos, lo que lo convertía en una pieza fundamental para la coordinación de hechos sicariales.
“Con la Operación Victoria, la Policía Nacional logra un golpe estratégico contra los responsables de homicidios a policías, debilitando las estructuras criminales y protegiendo a la fuerza pública y a la ciudadanía”, afirmó un portavoz de la Policía Nacional.
Esta captura no solo saca de las calles a un peligroso criminal, sino que también representa un paso firme en el desmantelamiento de las redes sicariales que operan en las principales ciudades del país. Puede seguir leyendo: Así eran John y Andrés, los 2 policías que mataron en Pasacaballos