La familia de María Camila Mendoza, una joven de 21 años oriunda de Santa Marta, ha alzado su voz para denunciar supuestas irregularidades en la investigación de su muerte, ocurrida el pasado 16 de agosto en Madrid, España. Los allegados de la víctima insisten en una investigación exhaustiva por parte de las autoridades españolas, ante lo que consideran un proceso judicial deficiente.

Según manifestó Laura Mendoza, hermana de la fallecida, María Camila había llegado a España hace dos años en busca de nuevas oportunidades. Residente legal en el país y en proceso de obtener la ciudadanía, la joven trabajaba en restaurantes y planeaba continuar sus estudios de criminalística, una carrera que había comenzado en Colombia.
Versiones contradictorias y dudas sobre el proceso
La última vez que su familia tuvo noticias de María Camila fue alrededor de la 1:00 de la madrugada del domingo, 17 de agosto, cuando la joven regresaba a casa tras haber salido con un grupo de conocidos. Horas después, la madre de María Camila fue contactada por un paramédico, quien le informó que su hija se encontraba en estado crítico en un apartamento del barrio La Elipa. Al llegar al lugar, la madre fue notificada del fallecimiento de la joven.
La familia ha manifestado su preocupación por las inconsistencias en las versiones de los hechos y la presunta falta de rigor en la investigación. Las personas que estaban con María Camila esa noche afirmaron que la joven había consumido diversas sustancias, una versión que sus amigos y familiares desmienten rotundamente, asegurando que ella no tenía ese tipo de hábitos.

La otra versión ofrecida a la policía indica que algunos de los presentes se sintieron mal, aparentemente por el consumo de alcohol, pero nunca buscaron asistencia médica.
Los familiares de la víctima cuestionan que las autoridades no hayan realizado un proceso completo de recolección de pruebas. Denuncian que no tienen certeza de que se haya llevado a cabo una autopsia o un examen toxicológico exhaustivo, y señalan que no se realizó una inspección detallada del apartamento. Adicionalmente, se lamentan de que no se tomaran declaraciones formales a las personas que compartieron la noche con María Camila.
La cremación del cuerpo impide nuevas pruebas
Ante la imposibilidad de asumir los altos costos funerarios en España, la familia de María Camila Mendoza se vio obligada a cremar el cuerpo de la joven. Esta decisión, tomada por los elevados precios para mantener el cuerpo en la morgue (2.000 euros diarios) o para la inhumación (más de 4.200 euros), ha cerrado la puerta a la posibilidad de realizar nuevas pruebas forenses que podrían arrojar luz sobre las circunstancias de su muerte. Lea también: Mujer lo denunció en Facebook y horas después apareció muerto y con panfleto