“Es muy triste levantarme con esta noticia, Robert. Fuiste un chico carismático desde pequeño. Dios te acoja en su santo reino y le de fuerza a esa familia que es como mi familia”. “Ve en paz muchacho. Dios te bendiga siempre y perdone tus pecados. Este es otro amanecer no agradable para Santa Rosa, en especial para esta familia tan buena y querida”. Lea: Andrea Fandiño, la profesora que murió al ser picada por enjambre de abejas
Esos son solo dos de los muchos mensajes que dejan en las redes sociales los familiares y amigos de Robert Pardo Sánchez, el joven de 22 años asesinado de una cuchillada en el tórax, en la madrugada de este lunes 11 de agosto, en Santa Rosa de Lima, norte de Bolívar.

Quienes lo conocieron lamentan su suerte, afirman que no merecía ese final y piden a las autoridades que investiguen y capturen a los responsables. Los hechos ocurrieron a eso de las 12 de la medianoche de este lunes, en las afueras de un establecimiento público ubicado en el sector conocido como Punto Corona.
Este medio habló con uno de los cuatro hermanos de la víctima y comentó que “Robert estaba en el estadero, departiendo un rato. A eso de la medianoche hubo un altercado con otro sujeto y terminaron en golpes. Mi hermano se fue del lugar caminando, pero más adelante aparecieron otros sujetos, hubo otra riña y lo acuchillaron en el pecho”.
Añadió que “yo no estaba en el lugar, pero me contaron que no fue un solo hombre quien lo agredió, fueron varios por lo que esperamos que los identifiquen y capturen pronto. No sabemos qué ocasionó aquel enfrentamiento”.
La familia está destrozada y ahora piensa en cómo será el futuro de la hija de Robert, una niña de 4 años que pregunta por él y espera verlo de nuevo. “Dejó a su hija pequeña, eso es algo muy lamentable. Mi hermano trabajaba con su papá en un taller de mecánica, así se ganaba la vida”, señaló el pariente.

“Hubo negligencia médica en Cartagena”: familia de Robert Pardo
Los parientes relataron que tras ser acuchillado, Robert fue trasladado al Hospital Local de Santa Rosa, donde lo remitieron a una clínica de mayor complejidad en Cartagena.
“En una ambulancia lo trasladaron a la Madre Bernarda, pero allá no lo quisieron atender porque decían que la urgencia estaba llena. Luego lo llevamos a la General del Caribe y nos dijeron lo mismo, por último llegamos al Hospital Universitario donde murió. Mi hermano iba hablando por todo el camino, estaba consciente”, relató con tristeza.

Añadió que “eso fue negligencia médica, prácticamente el paseo de la muerte porque viéndolo como estaba de mal no lo atendieron y así estuvo por una hora más o menos. Él se quejaba y nos hablaba y nosotros le dábamos fuerzas para que aguantara”.
Por último, los parientes piden a la comunidad de Santa Rosa mayor tolerancia y control a la hora de consumir bebidas embriagantes.