Marlen Amézquita Nemoga recuerda todos los días, entre lágrimas, a su hijo Santiago Ramos Amézquita. Cada mañana lo imagina, lo extraña, lo siente en su corazón, y durante el resto del día, cada imagen, cada palabra, cada sonido, lo mantiene en su mente.
Así vive desde la mañana del sábado 17 de diciembre del 2022, cuando con una llamada le informaron que su hijo había muerto. Que su cuerpo estaba sobre el jardín exterior de un conocido centro comercial en Bocagrande (Cartagena) y que se lanzó del cuarto piso, donde está el parqueadero.

Esta madre, natural y residente en Tunja, Boyacá, quedó paralizada y llena de preguntas luego de la llamada. Marlen no podía creer lo que pasaba y, aunque han transcurrido dos años y siete meses, todavía sigue sin entender qué ocurrió. Para ella son muchos los interrogantes y por eso acude a la prensa.
Marlen, la madre que busca la verdad tras la muerte de su hijo en Cartagena
“Es una herida que no sana, un dolor permanente. Yo no busco señalar a nadie ni afectar a nadie, lo que quiero como madre es saber qué pasó en realidad con mi hijo porque a la fecha su muerte permanece en Medicina Legal y en la Fiscalía bajo el término de ‘por esclarecer’ y es para que ya se supiera algo nuevo del caso”, dijo Marlen a este medio.
La mujer relató que Santiago tenía pocos días en la Base Naval en Bocagrande y que estando allí algo raro sucedió con él. “Mi hijo se graduó el 6 de diciembre de ese año de suboficial en Barranquilla. Estaba enfatizado en contabilidad y finanzas porque estudió en el SENA, entonces viajó a Cartagena y allá le designaron sus labores, era como unas prácticas”, contó. Lea: Investigan muerte de marinero que cayó de centro comercial en Bocagrande
Añadió que “el martes 13 de diciembre hablamos y me dijo que quería pedir la baja, es decir, que se quería retirar de la institución, pero no me explicó por qué. El viernes 16 entregó la carta a sus superiores, algo que no comprendo por qué lo hizo si él soñaba con la Armada, estaba en un gran momento, él amaba lo que hacía”.
Sobre el día de los hechos la mujer cuenta que “ese día mi hijo salió muy temprano de la Base y llegó al centro comercial donde se compró un helado. Una cámara de seguridad lo captó comiendo el helado, sentado en una banca y mirando su celular, luego lo ve subiendo solo hasta el cuarto piso donde está el parqueadero y hasta allí llega la grabación”.

Santiago fue hallado sin vida en el jardín exterior del inmueble y las autoridades manejaron los hechos como un suicidio; sin embargo Marlen duda que su hijo se quitara la vida.
“No tenía motivos que yo supiera para suicidarse, yo hablaba con él y lo único raro que me dijo era que en la Base le mandaron a realizar unos documentos de unas compras y lo vi dudoso con eso. Luego me dijo que iba a pedir la baja, después de luchar tanto por estar ahí”, relató Marlen.
Esta madre asegura que vino a Cartagena para reclamar el cuerpo de su hijo, realizó todos los trámites para la investigación del caso y todavía hay vacíos investigativos.
Santiago Ramos y su extraña muerte: era suboficial de la Armada
“Lo primero que no me cuadra es que a mí me avisaron muchas horas después de la muerte de mi hijo, es más, primero se enteraron los medios de comunicación e hicieron publicaciones. Lo segundo es que la Armada no me ha dicho gran cosa de lo ocurrido, pero lo más grave y por lo que ahora muevo el caso es porque donde mi hijo perdió la vida hay cámaras de seguridad y a mí nunca me han mostrado las grabaciones”, expresó.

Asegura que “nosotros hicimos una tutela con una ONG que nos está apoyando desde hace tiempo, pidiendo las grabaciones para determinar cómo ocurrió todo, pero solo me dieron unos fragmentos y no lo más importante que es su video en el parqueadero, desde donde cayó. Al yo no tener esa evidencia me creo muchos escenarios en mi mente, entre esos que alguien lo pudo citar hasta ese lugar y lanzarlo”.
Para Marlen no es descabellado creer que hay una segunda persona involucrada en el hecho. “Las condiciones en las que quedó el cuerpo en el suelo dan mucho qué pensar, al igual que los elementos que encontraron sobre la escena del crimen. Todo parece como si lo hubieran puesto estratégicamente, entonces por eso pido a las autoridades que revisen las grabaciones, solamente para aclarar qué ocurrió”, anotó.
Marlen ha estado atenta a los avances en los casos de la médico Tatiana Hernández, desaparecida el pasado 13 de abril cerca a Bocagrande, al igual que la muerte sin esclarecer del aprendiz del Sena Cristian García Castro en 2020 y José de la Cruz Hernández, desaparecido en la Avenida Santander, en 2023.
“Al ver a estas mujeres luchando por la verdad y por sus hijos, yo me uno a ellas. Lo que queremos es paz en nuestras almas conociendo qué ocurrió con nuestros seres queridos y para ello es importante revisar las cámaras de seguridad y videos de los sitios. Esperamos que se pueda llegar a la verdad de estos casos y si no la hallamos, por lo menos que hechos similares no ocurran más y para eso hay que tener una buena red de cámaras”, anotó.
Esta madre enfatiza en la dilatación de las autoridades sobre el caso de Santiago, afirmando que no revisaron el celular del joven, de 21 años, ni realizaron entrevistas a testigos y otros procesos investigativos importantes, por lo que pide a los encargados que no dejen de hacer su labor con amor y esfuerzo. “Porque pasa el tiempo y a nosotros nos sigue doliendo no saber qué hubo detrás de la muerte de mi Santi, porque él era una persona feliz”, finalizó.