En un importante golpe contra el crimen organizado, las autoridades capturaron a Jan Carlos Martínez Ospino, conocido como alias ‘Papañel’, señalado líder del Grupo Delincuencial Organizado (GDO) Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada.
La operación, liderada por el Gaula de la Policía Nacional en el marco de la estrategia “Todos Unidos Contra la Extorsión y el Secuestro”, se llevó a cabo bajo la Estrategia Integral Multicrimen (EIMUC).

Martínez Ospino fue detenido por orden judicial acusado de concierto para delinquir con fines de extorsión. Según las investigaciones, ‘Papañel’ era el principal responsable del tráfico de estupefacientes en Riohacha, una actividad clave para financiar a esta organización criminal.
Además, coordinaba una red de extorsiones que afectaba gravemente a comerciantes, transportadores y empresarios locales.
Así eran las extorsiones
Las pesquisas revelaron que las extorsiones —conocidas como “vacunas”— alcanzaban a sectores estratégicos como ganaderos, agricultores, distribuidores de combustible y hoteleros.
Estas exigencias económicas, que oscilaban entre $100.000 y $20 millones, generaban un ambiente de miedo en áreas urbanas y rurales, especialmente en Dibulla, Mingueo, Palomino y la Troncal del Caribe, importante vía de conexión entre Magdalena y La Guajira. Lea también aquí: Desde bicitaxi arrojan el cadáver de un hombre a plena vía pública

Alias ‘Papañel’ no es un desconocido para las autoridades, ya que cuenta con antecedentes por delitos como extorsión, tráfico de drogas y porte ilegal de armas. Tras su aprehensión, fue presentado ante un juez, quien determinó su reclusión en un centro penitenciario mientras avanza el proceso judicial, confirmó la prensa local.
Con esta acción, la Policía Nacional reitera su compromiso de combatir las estructuras criminales que afectan la tranquilidad de los ciudadanos, instando a la comunidad a denunciar cualquier actividad sospechosa que contribuya a desmantelar estas organizaciones delictivas. Puede interesarle leer también: Lo mataron y quemaron su cuerpo en Mandela: van 2 casos en un año