La noche del sábado 31 de mayo se convirtió en una tragedia para la familia de Laura Patricia Calderón García, una comerciante de 55 años que fue víctima de un ataque a bala dentro de su propio negocio, ubicado en el norte de Bucaramanga, Santander. El establecimiento comercial, denominado ‘Fuente de Soda Yurley’, está situado en el sector conocido como la bomba La Cemento.
Según relataron los empleados que se encontraban en el lugar, un hombre llegó al local vestido con ropa oscura y portando un casco. Actuó con total normalidad: pidió una cerveza, la pagó sin mostrar nerviosismo y luego caminó hacia el baño, donde en ese momento estaba Laura Patricia. Fue allí donde, sin previo aviso, sacó un arma de fuego y le disparó en repetidas ocasiones, logrando impactarla en la cabeza.
Tras cometer el ataque, el agresor huyó del sitio. Vanguardia dio a conocer que, de inmediato, personas del sector se acercaron para prestarle ayuda a la víctima, quien fue trasladada al Hospital Local del Norte. Debido a la gravedad de la herida, fue remitida a la Clínica Bucaramanga, donde permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos durante nueve días. Lea aquí: Amy Nova, se negó a pagar una segunda extorsión y por eso la mataron
Pese al esfuerzo del personal médico, a las 2:20 de la madrugada de este lunes 9 de junio se confirmó su fallecimiento. Desde el mismo día del atentado, la Sijin de la Policía Metropolitana adelanta una investigación para identificar y capturar al responsable.
Hasta el momento, se sabe que la comerciante no había expresado temor por amenazas ni mencionó tener conflictos personales o sentimentales. Como parte del proceso investigativo, las autoridades en Bucaramanga han recopilado imágenes de cámaras de seguridad y examinan el celular de la víctima. El cuerpo de Laura Patricia permanece en la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Bucaramanga. Siga leyendo: Ella era Liseth Carvajalino, la mujer que sicarios mataron en un restaurante