Después de una rigurosa investigación liderada por la Fiscalía General de la Nación y ante la contundencia de las pruebas recolectadas, Jorge Alberto Macías Manco, conocido con el alias de ‘ET’, fue condenado a 15 años y medio de prisión. La condena fue emitida por un juez penal del circuito de Medellín, tras la aceptación de cargos por parte del agresor, quien fue hallado responsable del delito de tentativa de feminicidio agravado contra su expareja, una joven de 21 años a la que le propinó 26 puñaladas.
El ataque, que causó conmoción e indignación entre los habitantes de Medellín, tuvo lugar el 7 de noviembre de 2024. Ese día, Macías Manco se dirigió hasta el lugar de trabajo de la víctima, ubicado en el corregimiento San Cristóbal, y, sin mediar palabra, la agredió con un arma blanca.
El ataque fue brutal y quedó registrado en las cámaras de seguridad del establecimiento, cuyos videos sirvieron como una de las principales pruebas en el proceso judicial.
En las imágenes se observa cómo el hombre ingresa al local de forma tranquila, con las manos en los bolsillos de su chaqueta, donde escondía el arma blanca. Una vez dentro, sacó el cuchillo y apuñaló a la mujer repetidamente hasta dejarla gravemente herida. A pesar de sus múltiples lesiones, la joven logró salir detrás del agresor, pero cayó inconsciente a una cuadra del lugar del ataque. Fue auxiliada y trasladada de inmediato al Hospital Pablo Tobón Uribe, donde los médicos le practicaron varias cirugías de urgencia.
La víctima permaneció durante varios días en la Unidad de Cuidados Intensivos, debido a que varias de las heridas afectaron sus pulmones y comprometieron su vida. Lea también: Mauricio mató a un hombre en un baile de picó en Bayunca: quedó grabado
Aunque logró sobrevivir, la pesadilla para la joven no terminó con su recuperación. Durante varios meses continuó recibiendo amenazas por parte de su agresor, quien se mantenía prófugo. Según denuncias de la víctima, Macías Manco le enviaba mensajes intimidantes en los que afirmaba que las 26 puñaladas eran solo “una caricia” comparado con lo que podría hacerle si lo volvía a ver. Incluso, le hacía llegar imágenes del momento en que ella era atendida tras el ataque, como una forma de amedrentarla aún más.
Con el fin de evadir la justicia, Macías huyó de Medellín y se trasladó a diferentes municipios de Antioquia. No obstante, las autoridades lograron ubicarlo y, el 27 de febrero, fue capturado en el municipio chocoano de Nueva Belén de Bajirá, en una operación conjunta entre la Policía de Medellín y unidades del Urabá antioqueño.
Antes de que se llevara a cabo la audiencia de acusación, el agresor decidió allanarse a los cargos que le imputó una fiscal de la Unidad de Delitos contra la Vida de la Seccional Medellín. Con ello, aceptó su responsabilidad en el intento de asesinato, lo que permitió avanzar rápidamente en su judicialización. Lea también: “Nuestra lucha sigue”: piden justicia por feminicidio de Verena Hernández