En abril del 2013, mientras asistía una cita odontológica, sicarios asesinaron a Leonardo Hortúa Blandón, alias ‘Mascota’, en el barrio San Luis de Cali, Valle del Cauca.
Le dispararon en más de cuatro ocasiones mientras era atendido en el consultorio donde muy pocas personas sabían que se encontraba en ese momento. Tenía prisión domiciliaria. Lea: Asesinan a hombre que pagó rescate de Lyan, el niño que estaba secuestrado
Leonardo sabía que su vida peligraba y por eso no salía. Sus enemigos eran los mismos de ‘Diego Rastrojo’, el líder de la banda criminal Los Rastrojos, quien fue un capo del Cartel de Norte del Valle, al mismo que perteneció alias ‘Chupeta’ y ‘Pacho Herrera’, entre otros.

‘Mascota’ se convirtió en el heredero de Los Rastrojos tras la captura de ‘Diego’ y con su nuevo título aparecieron muchos enemigos. Su muerte habría estado relacionada con ajuste de cuentas con otros capos de la región.
La historia de este hombre, con amplio prontuario criminal, volvió a aparecer en las noticias tras confirmarse que era el padre de Lyan Hortúa Bonilla, el menor que el próximo 29 de mayo cumple 12 años, y que recientemente fue dejado en libertad tras 18 días de secuestro en Jamundí, Valle del Cauca.

‘Mascota’ no pudo disfrutar a Lyan ya que lo asesinaron cuando este se encontraba en gestación. En el 2010 el hombre había sido capturado, pero le dieron el beneficio de casa por cárcel, argumentando problemas relacionados con su salud y allí embarazó a su esposa.
Tras el secuestro del menor se supo que, al parecer, no se trataba de un rapto común o extorsivo sino el cobro de una millonaria deuda a un capo que estuvo varios años privado de la libertad y al recobrarla decidió saldar cuentas. Supuestamente, la madre de Lyan fue testaferro de dicho excapo.