El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), en cabeza de la directora Astrid Cáceres, ha solicitado a la Fiscalía General de la Nación celeridad en la investigación abierta frente al caso de uno de los trabajadores del Hogar infantil Canadá sede F, en Bogotá, señalado de atentar contra la integridad de niñas en este lugar.
El Hogar Infantil está ubicado exactamente en el barrio Villa Javier, en la localidad de San Cristóbal y en esa zona hay conmoción y rabia desde la tarde de este lunes 5 de mayo. Le puedo sugerir: 58 años de cárcel para Brayan Campo por feminicidio de Sofía Delgado
La medida del Bienestar Familiar fue adoptada luego de que padres de familia denunciaran que al menos 12 niños habrían sido víctimas de presuntos actos de abuso sexual.
Según los padres de los menores, el funcionario investigado estaba a cargo de un grupo de 21 niños y niñas entre los 2 y 3 años de edad, y se habría aprovechado de sus posición para cometer los actos delictuales.
Según el testimonio de varias madres, el hombre señalado como presunto agresor manipulaba a los menores para llevarlos al baño, donde los amenazaba si no guardaban silencio. Uno de los testimonios más estremecedores asegura que usaba la comida como castigo si los pequeños hablaban. De este hombre se informó que aún no ha sido capturado.
“El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, a través de la Dirección Regional de Bogotá, informa que ha determinado el cierre temporal del Hogar Infantil Canadá Sede F en la Ciudad de Bogotá, luego de instaurar denuncia penal ante la Fiscalía contra uno de los trabajadores de la Asociación Parque Canadá, organización ejecutora del servicio.
“El trabajador ha sido denunciado por presuntos delitos contra la libertad, integridad y formación sexual, de acuerdo con el código penal y luego de recoger denuncias y quejas de familias del hogar infantil. La medida involucra adelantar los procesos administrativos y sancionatorios, no solo frente a la ejecución contractual sino también a la personería jurídica de la Asociación como entidad prestadora del servicio”, ha señalado la Dirección del ICBF a través de su página oficial.
Padres de niños de jardín infantil exigen justicia con un plantón
El ICBF informó que durante el cierre del jardín se brindará acompañamiento psicosocial a las familias afectadas, así como atención en otras unidades de servicio. A través de equipos defensoriales conformados por abogados, psicólogos, trabajadores sociales y nutricionistas, buscan garantizar el restablecimiento de derechos de los menores.
“Para el ICBF es inadmisible que esta situación se presente en un espacio que ha sido confiado a la entidad ejecutora para el cuidado y protección, una unidad de atención que cuenta con cámaras de vigilancia en las instalaciones, rutas de reacción y equipos que ejercen la supervisión; por tanto, ha determinado este cierre temporal de acuerdo con la visita de inspección, vigilancia y control realizada y la conversación sostenida con las familias. Le puede interesar: Cárcel para dos hombres indígenas señalados de abusar a dos hermanas
“Igualmente se iniciarán actuaciones disciplinarias que permitan establecer si en el manejo de la queja de la familia los funcionarios públicos y supervisores del contrato actuaron conforme a las rutas establecidas para tal fin”, señala el pronunciamiento oficial del ICBF.
Algunos de los niños se encuentran aún hospitalizados, y medios nacionales han reportado que dos de ellos fueron diagnosticados con VIH. Las familias exigen respuestas contundentes, no solo frente a los responsables directos del abuso, sino también contra quienes, desde la dirección del jardín, habrían actuado con negligencia al no alertar de inmediato a las autoridades cuando se conocieron los primeros indicios.
Las denuncias fueron presentadas ante la Fiscalía, y de las 12 registradas hasta ahora, siete ya han sido confirmadas por las autoridades competentes.
El caso ha generado una profunda indignación entre la comunidad. Padres de familia realizaron un plantón frente a las instalaciones del jardín, donde expresaron su dolor y exigieron justicia.
Además, denunciaron que el centro educativo, operado por la Asociación Parque Canadá, habría intentado encubrir los hechos, restándole gravedad a las primeras denuncias. En palabras de una madre: “Las directivas fueron cómplices por omisión. Nuestros hijos confiaban en ellos y nos fallaron”.
El hogar era operado por la Asociación Parque Canadá, sobre la cual también se abrirán procesos administrativos y sancionatorios por su responsabilidad en la prestación del servicio.
Desde el Bienestar Familiar aseguran que “reiteramos a la ciudadanía que toda denuncia, queja o actuación irregular con cualquiera de los operadores del servicio genera una investigación para el esclarecimiento de los hechos. Ninguna queja de una familia debe quedar sin indagación y sanción si fuera necesario”.