La masacre de una familia evangelista, en un restaurante de Aguachica, Cesar, ha causado interés y consternación nacional. Las autoridades, desde el 29 de diciembre, día de los hechos, no ha descansado en su afán de conocer los móviles y dar con los responsables.

Hace unos días fueron capturados cuatro sujetos, en el Norte de Santander, señalados de haber participado en el hecho de sangre donde perdieron la vida los pastores Marlon Lora, su esposa Yurlay Rincón y sus dos hijos, Ángela Natalia y Santiago Lora Rincón. Lea: A prisión presuntos asesinos del pastor Lora y su familia en Aguachica
Ahora se conoció que, en medio de una de las audiencias contra los sujetos capturados, se expusieron imágenes que demostrarían que los sicarios se confundieron en el momento del ataque y todo porque Ángela Natalia estaba vestida con suéter blanco, pantalón negro y cabello recogido.

La versión de una confusión toma mayor fuerza en la investigación y se le agrega que el posible objetivo de los pistoleros era Sayda Andrea Sánchez Polanco, alias ‘la Diabla’. Esta mujer estaba sentada en una mesa cercana a la familia masacrada.
Al parecer, ‘la Diabla’ estaba acompañada por sus escoltas y se encontraba en Aguachica porque su marido, alias ‘el Calvo’, había sido asesinado cinco días atrás y le estaban haciendo un velorio. Según los investigadores, la mujer estaba vestida de la misma manera que Ángela.
Tenían pantalón de color negro y una camiseta de color blanco, el cabello recogido y era mujeres atractivas.. La orden para los sicarios, según se supo, era matar a ‘la Diabla’ y a todos los que se encontraran con ella porque podían estar armados y se podría dar una retaliación en el sitio.
Con imágenes inéditas de cámaras de seguridad, la Fiscalía reconstruyó la escena del crimen, proyectando cada mesa en la que estaban tanto las víctimas como ‘La Diabla’, y en ambas se encontraban cuatro personas. El sicario primeramente le disparó a Ángela porque fue la primera persona que vio con las características.

Cabe mencionar que alias ‘la Diabla’ fue asesinada en enero, en Medellín, por dos sicarios venezolanos. Estos sujetos también fueron capturados. El inicio de esta macabra historia sería retaliación entre bandas de narcotraficantes por el tráfico en importantes zonas del país.
Aunque el caso parece que comienza a esclarecerse, hay muchos que consideran que el actuar sicarial no corresponde a una confusión, además, afirman que los sujetos capturados en Norte de Santander no tienen similitud con los sicarios grabados por cámaras en Aguachica.
