Jhon Jairo Triviño Angulo tenía apenas 22 años, tres de ellos dedicados a la Policía Nacional. Desde niño se inclinó por el servicio a los demás y, siendo todavía muy joven, decidió salir de su casa y pertenecer a la institución de la que se sentía orgulloso.

Lastimosamente, los sueños del joven se truncaron haciendo una labor para la institución en el municipio de Sabana de Torres, Santander, donde estaba adscrito. Lo que informó Vanguardia, medio de comunicación de Santander, es que el patrullero conducía una moto de la Ponal de marca Honda XRE 300 con destino a un taller en Bucaramanga, para hacerle unos arreglos al vehículo. Lea: Torturados y asesinados 2 jóvenes en Antioquia: uno es cartagenero
El objetivo era llevar este vehículo oficial hasta los talleres de mantenimiento en la ciudad de Bucaramanga, pero cuando iba en la vía entre La Lizama y San Alberto, justo en el sector intercambiador La Fortuna en jurisdicción de Barrancabermeja, perdió el control y chocó con el separador de la carretera, posteriormente con un árbol.

De inmediato lo llevaron a un centro médico, pero no hubo que hacer por él. Las autoridades investigan cómo ocurrió el accidente y si hay otro vehículo involucrado, también dio aviso a los familiares del policía, oriundo y residente en Cartagena.
El miércoles, altos mandos de los Departamentos de Policía Magdalena Medio y Santander, entre otros presentes, realizaron un homenaje especial para despedir al patrullero ya que fue trasladado a Cartagena vía aérea. Hubo palabras de agradecimiento, actos protocolarios y un minuto de silencio.

En su llegada a Cartagena, las escenas fueron más dolorosas ya que aquí lo esperaban sus seres queridos, quienes deseaban que regresara a la ciudad en diciembre, pero para compartir Navidad y Fin de Año. Nunca imaginaron que llegaría en un ataúd cubierto con una bandera nacional. El sepelio sería este día, en medio de otros actos protocolarios de la institución.