Con las horas se van conociendo nuevos detalles del cruel asesinato de Paola Andrea Herrera Vargas, de 36 años, en el barrio La Libertad de Cúcuta, Norte de Santander. Ocurrió a las 11:30 de la mañana del pasado sábado 14 de diciembre. Lea: Paola llegó de visita y sicarios la mataron de 28 balazos en una calle
Se supo que sicarios en moto le propinó 28 balazos a Paola cuando se movilizaba con su conductor en una camioneta Toyota Fortuner de placa GZV423. El vehículo fue estacionado frente a una panadería y la mujer envió al conductor al negocio para que le comprara panes, mientras ella seguía en el puesto de copiloto.

El conductor manejó hasta la Unidad Básica de La Libertad pero allí los doctores confirmaron que Paola había fallecido. La Policía Metropolitana de Cúcuta fue alertada sobre el crimen y llegaron al lugar para adelantar los actos urgentes. Allí se encontraron 14 vainillas que serán cruciales en la investigación.
Según conocieron las autoridades e informaron los portales de noticias, la mujer llegó a Cúcuta para saludar a sus parientes y también para acompañar a su pareja sentimental, quien reside en esa ciudad, porque estaba sacando pasaportes para que las dos se pudieran ir de viaje al exterior.
Paola Andrea vivía en Barranquilla y tenía apenas tres días en Cúcuta con su novia. Primero se hospedaron en un hotel, luego se alojaron en un apartamento. Todos esos cambios y la sevicia de su muerte hacen pensar que la víctima tenía un enemigo de mucho poder y ella estaba escondiéndose.

Años atrás, según portales de Cúcuta, la mujer tuvo problemas personales por el tráfico de estupefacientes, por lo que fue amenazada de muerte y se mudó de su tierra natal. Además, tenía una anotación judicial por un hurto el año pasado. Presuntamente se dedicaría a la compra y venta de divisas además del préstamo de dinero y estuvo presa, meses atrás, en Venezuela.
