La Policía Metropolitana de Cartagena, en el marco del Plan Titán y con el respaldo de la Alcaldía Mayor, realizó un operativo en la madrugada de este domingo 28 de abril, donde lograron el rescate de una adolescente, de 16 años, víctima de explotación sexual en un establecimiento ubicado en el corregimiento de Bayunca.
El secretario del Interior y Convivencia Ciudadana, Bruno Hernández, explicó que la menor fue puesta bajo custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, para el restablecimiento de sus derechos.
También se conoció que capturaron a tres personas que administraban el prostíbulo, acusadas del delito de estímulo a la prostitución infantil. Además se evidenció que el lugar era vigilado con nueve cámaras de seguridad y se descubrió que se estaban construyendo más habitaciones para ampliar la oferta de servicios sexuales.

“Nos trasladamos hacia Bayunca, atendiendo una denuncia de un ciudadano que acudió a la Secretaría del Interior y Convivencia Ciudadana. Allí encontramos un lugar en circunstancias similares al sellado, recientemente, en Ararca, Barú. Un sitio ubicado en la vía principal , donde encontramos un prostíbulo y estaba la menor de edad. Estamos cumpliendo las ordenes de nuestro alcalde mayor, Dumek Turbay Paz, para rescatar a las niñas, niños y adolescentes de las garras de pervertidos que, a través de estas casas del terror, explotan sexualmente a los menores de edad”, dijo el secretario del Interior, Bruno Hernández.

Con esta son tres las menores que, en menos de 15 días, el Plan Titán 24 ha logrado rescatar de las ‘casas del terror’ dedicadas a la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes.
El caso anterior se dio en Ararca, en la isla de Barú, donde dos propietarias de un establecimiento de prostitución fueron arrestadas y enviadas a la cárcel después de que dos menores, de 15 y 16 años, fueran encontradas en el lugar. Lea: Dos dueñas de bar explotaban sexualmente a 2 menores en Barú: así cayeron
Las dos mujeres detenidas enfrentan acusaciones por el delito de estímulo a la prostitución de menores y les fue dictada medida de seguridad por un juez de la República. Por su parte, las menores rescatadas han sido puestas a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) para garantizar el restablecimiento de sus derechos.