Wilber Coa Castro, de 37 años, siempre vivió en el barrio Olaya Herrera de Cartagena, pero hace un tiempo decidió probar suerte en otras tierras y eligió a la ciudad capital: Bogotá.
Se mudó en el barrio María Paz, en la localidad de Kennedy, y allí soportó frío, horas extenuantes de trabajo y la ausencia de sus seres queridos, todo por su deseo de sacar a su familia adelante.

Esos deseos murieron con el brutal ataque contra Wilber, ocurrido en la noche del pasado martes 19 de marzo, en la calle 5b Sur, por donde transitaba solo cuando fue atacado por un grupo de jóvenes.
Un testigo contó a Q’Hubo que “eso fue como a las 8:30 de la noche. El chico quedó tirado en la esquina. Antes de que lo mataran, se escuchó un gran alboroto, dicen que venían persiguiendo al hombre como unas 10 personas. Era una pandilla”.
Tal parece que el cartagenero volvía a su casa luego de retirar una pequeña suma de dinero en un corresponsal bancario del barrio. Debido a esta información no se descarta que el asesinato ocurriera en medio de un robo.
Otro testigo relató que: “lo que escuchamos fue que al muchacho lo estaban correteando y que, al parecer, le pegaron una puñalada en el cuello mientras intentaba escapar, y que después de que lo hirieron, el muchacho intentó esconderse en una tienda, pero ellos lo terminaron de matar allá con un cuchillo y le quitaron un dinero”.

Wilber luchó por su vida, intentó correr pero a tan solo una cuadra de recibir la puñalada, el hombre se desplomó en el piso y no despertó más. También fue golpeado con objetos contundentes.
“Toda esta calle se llenó de gente cuando el señor estaba tirado en el piso. En ese momento se escucharon como dos disparos. Yo me asomé y vi a un hombre parado al lado del señor que estaba tendido en el piso con su jean azul claro y su chaqueta gris clara, y el tipo que estaba parado delante de él le pegó un tiro en la cabeza para rematarlo”, comentó un residente del sector. Lea: Investigan la extraña muerte de un universitario bolivarense en Bogotá
Después de este cruel ataque, varios testigos cuentan que algunos de los implicados en la muerte de este hombre se quedaron merodeando el sitio del crimen, mientras la hermana de la víctima llegaba para averiguar qué había pasado con su hermano.
Wilber fue trasladado rápidamente por los agentes de policía hasta el Hospital de Kennedy, donde falleció producto de una herida de arma blanca en su cuello y una herida de arma de fuego en su cabeza. Hasta el momento se desconocen los móviles de este crimen pero no se descarta un hurto, por lo que a la víctima no se le encontraron sus pertenencias.