Alejandrina no ha podido conciliar el sueño. Ya han pasado casi 48 horas y aún no sabe dónde está Daniel Alejandro Graterol Castillo. Esté como esté, ella solo quiere “que me devuelvan a mi hijo”.
La angustia y el temor no se han apartado de Alejandrina desde el sábado (28 de octubre). Ese día, a las 11:30 de la mañana, al único varón de sus cuatro hijos, de 17 años, se lo llevó la fuerte corriente de un caño que cruza el barrio El Pozón, en el suroccidente de Cartagena.
Alejandrina sabe que las esperanzas de encontrar con vida a su hijo son pocas, pero muy adentro de su ser tiene la ilusión de que el joven haya podido salir por sus propios medios del caño y esté deambulando por algún sector de ese populoso barrio. Le puedo sugerir: Así va búsqueda de menor, de 16 años, que desapareció en caño de El Pozón
Es por eso que en su casa, en el sector La Unión, las cadenas de oraciones se han multiplicado. Acompañada de sus vecinos, no ha dejado de orar y de pedirle a Dios que interceda para que aparezca su hijo, “esté como esté”.
Solo en la mañana de este lunes (30 de octubre), dice Alejandrina, una cuadrilla de la Cruz Roja, llegó a la zona donde vieron por última vez al menor para inspeccionar y analizar qué pudo pasar con Daniel.
Amaury Morelos, presidente de la Junta de Acción Comunal del sector Isla de León, de El Pozón, le dijo a la madre de Daniel que con una lancha realizarán un recorrido por toda la zona que recorre el canal en busca del cuerpo. Le puede interesar: Devoto a Dios y monaguillo: así era Andrés, el menor que se ahogó en Crespo
Jugando con láminas de icopor
En diálogo con El Universal a orillas del caño conocido como Chiamaría 2, que pasa por la parte posterior del sector Ciudadela La Paz, Alejandrina recordó cómo ocurrió la tragedia que hoy la tiene viviendo la peor de sus pesadillas.
“No estaba lloviendo en esos momentos. Había llovido fuerte si, pero ya había escampado. Mi hijo y otros dos vecinos de la edad se pusieron a jugar con láminas de icopor. Cada uno se montó en una lámina y se dejaban llevar por la corriente”, relata Alejandrina sin poder contener el llanto. Lea también: Emergencia: reportan tres desaparecidos en caño del barrio El Pozón
“De un momento a otro, me contó uno de esos muchachos, la corriente, que viene de Turbaco, se subió de repente y los arrastró a los tres. Todos quedaron enredados entre la basura y los manglares, pero dos de ellos pudieron salir”, agrega la atribulada madre.
Desde entonces, dice la desesperada madre, la búsqueda por encontrar a Daniel no ha parado. Todos en El Pozón acompañan a Alejandrina en estos momentos difíciles. Ella quiere que se lo devuelvan “esté como esté”.
La búsqueda se está centrando en la espesa zona de manglar en donde se vio por última vez a Graterol, pero las condiciones son difíciles, toda vez que los manglares han generado un espeso bosque con características de humedal, que dificultan la búsqueda.
Los organismos de socorro y la Oficina Asesora para la Gestión del Riesgo de Desastres de Cartagena se sumaron a la búsqueda del joven de 17 años, Daniel Graterol Castillo, quien se lanzó a nadar en el canal Chiamaría 2 del barrio El Pozón el pasado sábado en medio de la lluvia.
“Desde el primer momento, Bomberos y Defensa Civil hicieron presencia en el sitio para la búsqueda que se ha hecho de manera terrestre, recorriendo la ribera del canal y en botes en la zona navegable que desemboca con la Ciénaga de la Virgen”, dice la Oagrd.
Este lunes, se sumó a las labores de rescate un grupo de apoyo de la Cruz Roja, que además está brindando acompañamiento psicosocial a los familiares del menor.
También se está usando tecnología con dron para hacer un barrido de toda la zona, especialmente, el descole en la Ciénaga de la Virgen, ya que el manglar espeso impide ver la superficie del agua en el lugar exacto en el que se perdió de vista a Graterol.