“No me demoro, hago una carrera y vuelvo enseguida”. Luis Alfonso Guzmán Góngora hizo una promesa que las balas no le permitieron cumplir.
Su familia recuerda con claridad esas últimas palabras que pronunció antes de salir en su moto a trabajar. Le pidieron que se quedara y compartiera con ellos, pero él insistió en que no demoraría.

“A los 10 minutos nos llamaron a decir lo que había pasado. Se lo llevaron al Hospital Universitario del Caribe, hablaba todavía, pero al poco tiempo murió”. El padre de Luis Alfonso está desconsolado. En la morgue de Medicina Legal contó lo que sucedió en la tarde del lunes en el barrio Nuevo Paraguay. Lea: Sicarios balean a 2 hombres en un parque: una de las víctimas está grave
“Mi hijo vivía con su abuela en el barrio Bruselas. Allá llegamos mi hijo menor y yo a visitarlo, veníamos del pueblo y decidimos quedarnos esa noche acá en Cartagena. Cuando estábamos compartiendo, Luis recibió una llamada, dijo que saldría y no demoraría”.
Faltan respuestas
El padre de Guzmán Góngora tuvo que cambiar sus planes y no regresar el lunes al pueblo en que vivía, como había previsto. Ahora debe encargarse de las diligencias para retirar el cuerpo de la morgue y despedirlo como merece.
Lo que le duele en realidad es que el mayor de sus hijos, el primero de cuatro, murió en un acto que no merecía: “Él no tenía problemas, no peleaba, era un muchacho sano”.
Lo que pasó, dice su papá, es que compartía con alguien contrario a él. “Lo que me dicen es que andaba con personas que sí tenían problemas, y como lo veían tomar y estar con ellos la cogieron con él”.
En el ataque otra persona resultó herida, pero de ella no han entregado información. Siga leyendo: Dentro de un taxi, y frente al conductor, pasajero mató a su acompañante