Lilia Guzmán Ahumada cumpliría mañana 56 años. Sus familiares dicen que estaba muy feliz, ya que esta fecha para ella era muy especial, pues era la oportunidad que tenía para compartir con allegados, vecinos, compañeros de trabajo.
Aseguran que desde hace unos días había realizado algunas llamadas pasando “carta de invitación” con el fin de que no se fueran a perder la “tremenda” olla de sancocho que iba a preparar.
La celebración no se realizará. Sus familiares tendrán que velar sus restos por una fatal imprudencia e irresponsabilidad por parte de un aprendiz de conducción y su “tutor”, que le quitó la vida cuando ella se dirigía a su casa.
“Ella era el motor de esta familia. Deja dos hijos, tenía a su cargo a su mamá por la que se desvivía y dos nietos que eran su vida. Estas personas acabaron con la alegría de esta casa. Esto no volverá a ser lo mismo”, dijo un allegado.
Lo sucedido
Sobre las circunstancias del terrible suceso donde perdió la vida la mujer, relata un pariente que si bien el conductor nunca tuvo la intención de atropellarla y quitarle la vida, si se juntaron varias imprudencias que en muchas ocasiones terminan ocasionado tragedias que se pueden evitar.
Lo que se relata es que siendo las 5:40 de la tarde de ayer lunes, Orlando Cuentas Argel decidió agarrar el vehículo tipo taxi para enseñar a manejar a su hermano Jorge Luis Cuentas Argel. El inexperto aprendiz, tras realizar una maniobra peligrosa, no pudo controlar el vehículo, de placas FXT-309, y atropelló a Lilia, aprisionándola contra la pared de la pista atlética que está en la Villa Olímpica.
“Ella iba por el andén con unas amigas del trabajo. Y ellos estaban manejando en el parqueadero detrás del estadio de béisbol Abel Leal, lugar que nos es apto para enseñar. Además, el taxi estaba pico y placa y el muchacho no tenía licencia de conducción; su hermano no es instructor de manejo”, precisaron familiares sobre las fatales imprudencias.
Lilia Guzmán se dirigía a su casa luego de una jornada de trabajo en Atunes de Colombia (Seatech), en donde llevaba más de 20 años de trabajo. Fueron sus amigas, quienes se salvaron de ser arrolladas, las que le avisaron a los familiares, que viven en el sector 11 de Noviembre, de Olaya Herrera, callejón Ricaurte.
La señora fue llevada en una ambulancia a la clínica Higea, que está en Amberes, pero siendo las 7:30 de la noche falleció tras sufrir un paro cardíaco.
Una de sus hijas asegura que estaba esperando ansiosa su jubilación, pues le faltaba poco para cumplir con esa meta. Su deseo era poder descansar tras largos años de trabajo. Es por ellos que todos piden que se haga justicia y los responsables de esta muerte paguen.
Se investiga
Las autoridades indicaron que las investigaciones comenzaron, por lo que en principio al conductor del taxi, Jorge Luis Cuentas, se le elaboró una orden de comparendo por no tener licencia de conducción; además, su hermano Orlando también fue sancionado por impartir enseñanza automovilística sin estar autorizado para ello. Ambos viven en el barrio El Líbano.
Las hipótesis que se manejan son impericia en el manejo y recibir enseñanza automovilística por un instructor no autorizado. Sin bien estas dos personas fueron detenidas por la Policía, fueron dejadas en libertad, pero seguirán ligadas a la investigación.
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