Un “desorden” novembrino en el barrio Las Gavias que terminó en trifulca y con balas tiene a un adolescente, de 17 años, internado en la Clínica Gestión Salud, de San Fernando.
Según sus familiares, a Dilan Alberto Andrade Coronel lo habría herido en la pierna derecha un policía cuando varios uniformados controlaban el orden público el martes en la noche en esa zona de la ciudad.
Cuenta el joven que a eso de las 9:50 p. m. llegó en un taxi al barrio Las Gaviotas con dos amigos porque uno de ellos recomendó una discoteca donde comer.
“Cuando nos bajamos del taxi y nos dirigíamos hacia el sitio, unos uniformados nos hicieron una requisa. Todo estaba normal, pero de un momento a otro ellos salieron corriendo para donde estaba el desorden”, anotó el adolescente. Según el muchacho, en el barrio de al lado -Las Gavias-, se había formado un tropelín entre algunos jóvenes y la Policía.
“Cuando nosotros vimos que las motos y las personas se devolvían hacia donde estábamos nosotros, mis amigos y yo nos cruzamos de acera para no quedar en la mitad, pero que va, no fue suficiente”, expresó Dilan. El adolescente asegura que al ver el tumulto de gente que se le acercaba a pesar de estar en el otro lado, corrió junto a sus amigos. Fue entonces cuando se escucharon varios disparos.
En su desespero por evitar ser alcanzado, Andrade Coronel no se percató de que había sido lesionado. “No me había dado cuenta, sino que sentí al rato que la pierna se me durmió”, aseguró. Una bala perdida lo impactó en el gemelo derecho y se le alojó en la tibia, fracturándole el hueso.
Al ver la sangre, el joven se asustó demasiado y pedía a gritos que lo ayudaran. “Uno de los amigos míos se quitó el suéter y me vendó la pierna, luego llamaron a mi mamá para informarle. Uno de los mototaxistas que huía de la pelotera fue quien me llevó hasta la Clínica Barú. Allá llegó mi mamá y pidió que me remitieran a Gestión Salud”, explicó Dilan.
Y aunque no es una lesión que comprometa ni su extremidad ni su vida, la madre de Dila, Yina Coronel, pidió prudencia a la Policía. “Ellos deben tener más cuidado cuando vayan a hacer sus controles, y no deben andar disparando en contra de las personas de esa manera. Imagina donde el disparo hubiese sido en otra parte vital, no estaría vivo ahora”, narró la mujer.
En cuanto al procedimiento, a Dilan no le van a retirar el proyectil que tiene alojado en la tibia, sino que lo van a tratar con antibióticos y le van a enyesar la pierna.
