El panorama para los suyos parece desesperanzador. Amigos, parientes, colegas y conocidos de Offer Noam Erickson pidieron a las autoridades que siguieran buscando a este israelí, quien el 10 de febrero próximo cumplirá un año de haber desaparecido en Cartagena.
El suceso fue informado al Ministerio de Relaciones Exteriores y el cónsul de Israel se puso en contacto con las autoridades locales para pedir celeridad en el proceso de búsqueda.
Y es que el empresario de 43 años es muy conocido en la ciudad por ser dueño de las discotecas La Santa y VIP, en el Centro Histórico.
“Él tiene problemas del corazón y la columna, y tiene que tomar medicamentos o de lo contrario su vida corre riesgo”, dijo en su momento un colega del extranjero, luego que desapareciera, agregando que, junto a varios amigos, había recogido $30 millones y que los ofrecían como recompensa a quien diera información de su paradero.
Sin embargo, todo indica que la suerte de este hombre podría ser oscura, más que eso, macabra. Al israelí podrían haberlo asesinado, y las autoridades sospechan que el sitio donde pudo haber ocurrido el crimen sería nada más y nada menos que el inmueble que compatriotas suyos administraban en el barrio El Laguito, el cual entró en proceso de extinción de dominio porque las indagaciones de la Fiscalía General de la Nación indican que allí se harían fiestas sexuales con participación de menores y con drogas: Casa Benjamin.
Es un entramado que tratan de descifrar las autoridades, de lo que sería una novela de horror, por todos los ingredientes que se van agregando.
Offer Noam llegó hace varios años a Cartagena, donde se estableció. Se dedicó al negocio de las discotecas y se conoció que es dueño de inmuebles en El Laguito y Manga.
Vivía en este último barrio, en un apartamento, en un edificio que está en la calle 24. El 10 de febrero del año pasado, el extranjero estaba en su residencia, dicen que acompañado de un amigo y uno de sus trabajadores.
Dicen que a las 11 de la noche recibió una llamada a su celular. Dijo a sus acompañantes que saldría por un momento y que regresaba pronto.
Offer partió en su camioneta, marca Nissan Pathfinder, un vehículo costoso. A Offer se quedaron esperándolo, pues no regresó a su apartamento.
Las indagaciones dejan ver que luego llegó al Centro Histórico. Eso quedó captado en un video de una cámara de seguridad, pues pasó en su camioneta frente a la entrada de una de sus discotecas. No bajó del vehículo, solo se detuvo al frente, saludó al portero y siguió. Ese video de la cámara de seguridad del negocio está en poder de la Policía y la Fiscalía.
El caso fue puesto en manos del Gaula de la Policía, pero se descartó que se tratara de un secuestro. Amigos del israelí se manifestaron y pidieron a las autoridades que arreciaran la búsqueda.
La Fiscalía lidera la investigación del caso, pero, aunque aún no hay algo claro, todo indica que a Offer podrían haberlo matado.
Ello quedó demostrado en julio del año pasado, cuando la Fiscalía General de la Nación planeó el operativo de grandes proporciones en la ciudad en torno a la operación Vesta, que dejó la captura de 17 presuntos proxenetas en la ciudad. Entre ellos estaban dos israelíes a los que atraparon en la Casa Benjamin en El Laguito, señalados de hacer fiestas sexuales en ese lugar y, presuntamente, expender drogas en estas.
Lo particular del caso es que ese mismo día que llegaron a capturar a los israelíes (un tercero fue capturado por presunta posesión de drogas), los efectivos de la Fiscalía también llevaron un equipo de criminalística. Peritos forenses que, al parecer, llegaron con información puntual para llegar a una de las habitaciones del lugar y hacer una inspección técnica.
Todo indica que en esa habitación los peritos hallaron trazas de sangre, gracias a la utilización de reactivos químicos. Las muestras fueron recolectadas y llevadas a laboratorios para determinar si pertenecerían a Offer Noam, el israelí desaparecido.
“Es una de las líneas de investigación de la Fiscalía General de la Nación”, confirmó una fuente oficial, respecto a la hipótesis del posible asesinato del ciudadano israelí.
De confirmarse que la sangre hallada en una de las habitaciones es del extranjero desaparecido, se prevé que las personas que estaban a cargo del inmueble sean objeto de un proceso penal por este caso. Hasta ahora la suerte de Offer sigue siendo incierta y las autoridades no se han pronunciado oficialmente respecto a los resultados de las indagaciones.



