Desde que Sor Teresa Gómez Álvarez se casó con Manuel Gil, hermano medio de los hermanos Castaño Gil, se convirtió en una de las personas que mayor confianza generó en los jefes del paramilitarismo en Colombia.
El hecho de ser oriunda de Amalfi, Antioquia, hizo que conociera a la familia desde que era muy joven y se ganó la confianza absoluta de Fidel, el mayor de los hermanos, hasta el punto que terminó convertida en una de las escuderas de la familia.
Pese a que en los diferentes medios la señalan de ser hermanastra de los Castaño su real vínculo es que eran cuñados y más que eso, ella se había convertido en la principal testaferra de la familia.
Su nombre, que pareciera el de una religiosa por lo de sor, empezó a sonar en Córdoba con mayor fuerza a finales de la década de los 80 cuando llegó al territorio a ayudar a sus cuñados en un proceso de lucha que ya habían iniciado con la creación de los Pepes en contra de Pablo Escobar.Sor Teresa, llamada así por la devoción religiosa de sus padres, se convirtió en la década del 90 en la directora de la Fundación para la Paz de Córdoba, brazo social de los hermanos Castaño, a través de la cual se regalaron cerca de 12 mil hectáreas de tierra a 2.500 familias, que finalmente fueron nuevamente compradas por ella y que hoy son motivo de restitución en Córdoba.
Irónicamente Sor Teresa era el brazo derecho de sus cuñados hasta el punto que fue la garante del testamento escrito por Carlos Castaño para repartir sus bienes y justamente fue su yerno, Jesús Ignacio Roldán, alias ‘Monoleche’ el encargado de asesinar a Carlos Castaño, el menor del clan, en el año 2003.
Muerto Carlos Castaño, Sor Teresa quedó al servicio de Vicente Castaño pero esta vez su accionar se trasladó al Urabá donde lideró asociaciones para quedarse con las tierras de los campesinos de la zona donde Vicente estaba adelantando un proyecto de palma africana.
Lo último que se supo en Córdoba de ella era que había sido condenada por el crimen de la líder de reclamantes de tierras Yolanda Izquierdo, en el año 2007, cuando un sicario acabó con su vida en la puerta de su casa en un sector popular de Montería.
Izquierdo justamente había llegado a su casa tras interponer una queja ante Fiscalía y Defensoría sobre el riego que corría su vida por el proceso que estaba adelantando.
Algunos dicen haberla visto movilizarse en Córdoba, en un carro con vidrios polarizados. Sin embargo, su captura se produjo en zona rural de Jamundí, Valle, donde se encontraba escondida en casa de una hermana.
La captura de Gómez Álvarez, representa para los campesinos que están en el proceso de restitución de tierras en Córdoba la ratificación del respaldo y el compromiso del Gobierno Nacional en defender la vida digna de las víctimas y combatir a todo aquel que quiera entorpecer los procesos de reparación, indicaron varios de ellos. (Lea aquí: Capturada cuñada de los hermanos Castaño)
