El cuerpo humano funciona como un sistema perfectamente coordinado. Los meniscos, estructuras cartilaginosas situadas entre la tibia y el fémur, son esenciales para la articulación de la rodilla, ya que amortiguan los impactos y soportan el peso del cuerpo, garantizando estabilidad y movimiento eficiente; sin embargo, estas estructuras son vulnerables a lesiones, tanto por traumatismos como por el desgaste progresivo.
En deportistas, los desgarros en esta estructura suelen ser consecuencia de giros bruscos o impactos. En cambio, con la edad, los meniscos tienden a perder hidratación y elasticidad, lo que provoca rupturas degenerativas. Estas lesiones se manifiestan con dolor, bloqueos articulares o derrames recurrentes de líquido sinovial. Lea también: Lesiones de ligamentos cruzados, en aumento en el fútbol: síntomas y causas
El doctor Emilio Calvo Crespo, del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, explica que “hay otras articulaciones donde hay meniscos, como por ejemplo en la cadera, donde también se manifiestan con dolor y por la pérdida de movilidad como consecuencia del bloqueo de la articulación. O en el hombro, y se presenta con inestabilidad, porque el hombro se traba fácilmente”.

Para tratar lesiones leves, se recomienda reposo, aplicación de hielo y analgésicos; sin embargo, rupturas más graves pueden requerir cirugía, especialmente si afectan el movimiento o dañan el cartílago articular.
La prevención es esencial para la lesión de menisco
Fortalecer los músculos de las piernas mejora la estabilidad de la rodilla, mientras que mantener un peso saludable reduce la presión sobre los meniscos. Además, una buena condición física permite disfrutar de actividades deportivas sin comprometer la salud articular. Una buena musculatura ayuda a coordinar el movimiento de la rodilla y prevenir lesiones del menisco. Lea también: Salud mental, clave en la formación de deportistas de alto rendimiento
Cuidar los meniscos no solo garantiza una mayor calidad de vida, sino también la posibilidad de evitar complicaciones futuras que puedan limitar la movilidad.