comscore
Salud

Dolor de espalda en la adolescencia: causas y cómo prevenirlo

Las malas posturas y la vida sedentaria pueden ser la causa de la prevalencia del dolor de espalda y cuello en los niños y adolescentes

Dolor de espalda en la adolescencia: causas y cómo prevenirlo

El síndrome de cuello de texto es un trastorno muscular a causa de la mala posición del cuello. //Foto: 123RF

Compartir

Según la Sociedad Española de Columna Vertebral (GEER), el 70% de los menores de 16 años habrá tenido alguna vez molestias en la espalda, de ellos el 8% podría sufrirlas de forma crónica. La mayoría de los casos de dolor de espalda, que se dan sobre todo en la adolescencia más que durante en la infancia, son funcionales, es decir, están relacionados con contracturas, malas posturas y la vida sedentaria.

El presidente de la GEER, Luis Álvarez Galovich, explica que en la infancia “es muy poco frecuente” el dolor de espalda, de hecho, si aparece y es recurrente, hay que sospechar que pueda haber algo más grave detrás, más allá de una molestia postural. Lea: Así puedes ayudar a una persona que quiere atentar contra su vida

La mayoría de los casos de dolor de espalda están relacionados con malas posturas y la vida sedentaria.

”Para eso los niños son muy flexibles, muy elásticos. Es raro que tengan un dolor de espalda continuado en el tiempo. En la adolescencia, sin embargo, sí, ya pueden empezar a producirse más molestias de carácter más mecánico, por posiciones continuadas”, apunta Galovich. Lea: Nuevos hallazgos sobre la causa de la dislexia: descubre los detalles

Pero, además, los niños son más activos, están moviéndose continuamente, jugando, con lo que cambian de postura. Sin embargo, en la adolescencia, y sobre todo en estos tiempos con las pantallas, se mantienen posturas más estáticas durante más tiempo. Esto hace que “los músculos puedan perder tono, puedan contracturar y desarrollar molestias”.

La influencia de las pantallas

Cuando están en clase, si están mal sentados, comienza una molestia y cambian de posición, pero, subraya el experto, esa sensación se pierde cuando hay una pantalla delante.”Con la pantalla, digamos que la atención no se centra en las molestas sino, simplemente, en la propia pantalla, y hace que las posiciones mantenidas sean más prolongadas. Eso se ve, por ejemplo, cuando uno viaja en transporte público. Todo el mundo está usando el móvil y está absolutamente estático. En cambio, si leen un libro, se mueven más”, añade Galovich. Lea: Migraña: síntomas claves para identificarla a tiempo

Por esta razón puede aparecer el “síndrome de cuello de texto”. Se trata de un trastorno muscular a causa de la mala posición del cuello al estar inclinado hacia delante durante un periodo largo de tiempo, que puede producir dolor y rigidez cervical.

El síndrome de cuello de texto es un trastorno muscular a causa de la mala posición del cuello. //Foto: 123RF
El síndrome de cuello de texto es un trastorno muscular a causa de la mala posición del cuello. //Foto: 123RF

Explica que el peso medio de la cabeza de un niño ronda los 2 kilogramos. Por cada dos centímetros que se incline hacia adelante, se multiplica por dos la presión ejercida sobre la columna cervical. Esta sociedad médica asegura que la edad a la que puede aparecer la dolencia se está adelantando a causa de los dispositivos. Lea: Relaciones narcisistas tóxicas: ¿Cómo identificar y evitarlas?

Una buena higiene postural

Pero el dolor de espalda en la adolescencia y el ‘síndrome de cuello de texto’ no solo puede aparecer por el uso de los dispositivos, también por una mala postura al leer o estudiar en casa porque la posición es continuada y mirando hacia abajo. Lea: El confinamiento por covid-19 afectó el desarrollo cerebral en jóvenes

Por eso el experto recomienda el uso de pequeños atriles que levanten un poco el libro “para evitar la flexión forzada de la cabeza”. Además, aconseja no mantener la misma posición durante más de 30 minutos, sobre todo “cuando la cabeza está cayendo continuamente hacia abajo”. De esta forma, se relaja la musculatura, se evita la tensión y las contracturas.Y el ejercicio físico es crucial. No hay que obligar a uno en concreto sino el que le guste al menor, que tonifique los músculos y que disfrute.

Únete a nuestro canal de WhatsApp
Reciba noticias de EU en Google News