El embarazo ya no es sinónimo de debilidad. En la actualidad, muchas mujeres han perdido el miedo de ejercitarse, trabajar o hacer tareas domésticas que impliquen un esfuerzo extra.
Y es que durante esta etapa la actividad física es importante para la salud y el bienestar tanto de la madre como del bebé pues ayuda a aliviar las molestias comunes y la recuperación postparto.
El Universal conversó con Silfredo Frías Angulo, especialista en fisioterapia obstétrica y deportiva, sobre los beneficios de esta disciplina durante el embarazo.
“El miedo a la fisioterapia es comprensible porque la madre está enfocada en proteger a su bebé en todo momento y toma una actitud cautelosa”, expone el profesional.
Asimismo explica que uno de los miedos más comunes que sienten las mujeres es “lastimar a su hijo o generar complicaciones que adelanten la fecha de parto”, sin embargo, son más los beneficios que los riesgos para ambos.
Beneficios para el bebé:
- Mejor desarrollo cardiovascular.
- Peso ideal al nacer.
- Desarrollo neurológico ideal.
“Hay estudios que sugieren que los bebés que nacen de madres que hacen ejercicio tienden a ser más tranquilos y a tener un temperamento equilibrado durante los primeros meses de vida”, amplía.
Y deja claro que no hacer ejercicio durante el embarazo pude desencadenar riesgos tanto para la madre como para el bebé y aunque cada organismo vive esta etapa de manera diferente, y algunas mujeres tienen indicaciones médicas especificas, “es necesario la actividad física moderada y orientada por expertos”.
Entre los riesgos se encuentran: aumento excesivo de peso, debilidad y dolor muscular, problemas de circulación, psicológicos y complicaciones en el parto.
Beneficios para la madre:
- Mejorar el bienestar físico. Es importante controlar el peso, fortalecer la musculatura, mejorar la postura y disminuir el riesgo de complicaciones como la preeclampsia y la diabetes gestacional.
- Fortalecer el sistema cardiovascular. Mejorando la circulación sanguínea para reducir la hinchazón y prevenir la formación de varices.
- Recuperación más rápida.
- Reduce el estrés y la ansiedad.
- Mejora el sueño y la sensación de bienestar.
- Alivia los dolores lumbares y reduce el riesgo de dolores ciáticos.
“Es importante que las futuras mamás consulten a su médico y junto a los especialistas incorporen actividad física segura para su embarazo. Y así poder disfrutar de su etapa sin cambios que afecten su vida o la de su bebé”, indica Frías Angulo.
Fisioterapia en las distintas etapas del embarazo
Durante la gestación:
- Fortalecimiento y estiramientos para que el cuerpo soporte el peso extra. Ejercicios para el suelo pélvico, la espalda y los abdominales.
- Manejo del dolor con terapia manual. Se les enseña a las mamas a tener una buena postura para evitar sobrecarga en la columna vertebral.
Preparación para el parto:
- Se trabajan técnicas de respiración, relajación y posiciones de parto que ayuden a reducir el dolor.
Postparto:
- Recuperación del suelo pélvico para prevenir la incontinencia urinaria y la diástasis abdominal.
- Manejo de los dolores residuales que se dan en la espalda, pelvis o piernas.
- Reubicación de la postura, especialmente cuando hubo cambios que afectaron la columna vertebral.