Aunque en el día a día, por las diferentes ocupaciones, suele restarse importancia a una tarea tan sencilla como el lavado de manos, es necesario recordar que esta actividad básica y que no demanda mayor tiempo es una de las principales herramientas para evitar que las enfermedades aparezcan de forma constante. Lea: Día de lavado de manos: especialistas insisten en la importancia de este hábito
En un mundo de amenazas invisibles esta práctica tan simple, puede ser la manera más efectiva para controlarlas y erradicarlas. Nuestras extremidades son una herramienta invaluable, pero tras el contacto con superficies contaminadas pueden ser portadoras de gérmenes y microorganismos que pueden causar infecciones y enfermedades.
Según la Organización Mundial de la Salud, el lavado de manos frecuente reduce el contagio de las enfermedades respiratorias en un porcentaje del 16 al 21% y también reduce la cantidad de personas que se enferman y presentan diarrea en un 23 al 40%.
A propósito del Día Mundial del Lavado de Manos, que se celebra todos los 5 de mayo, NUEVA EPS enfatizó la importancia de seguir un proceso de lavado de manos adecuado para garantizar una limpieza efectiva.
“Comience mojando sus manos con suficiente agua, luego, aplique una cantidad suficiente de jabón y no olvide frotar todas las superficies, enjuague sus manos minuciosamente y finalmente, séquese las manos con una toalla limpia o una toalla de papel, evitando fuentes compartidas de humedad”, detalló la EPS a través de un comunicado. Lea: ¿Por qué es tan importante mantener el hábito del lavado de manos?
¿Cuándo debo lavarme las manos?
Tenga en cuenta estos momentos en los que se recomienda lavarse las manos.
1. Antes de tocarse la cara.
2. Después de toser o estornudar.
3. Después de ir al baño.
4. Antes de preparar y consumir alimentos.
5. Antes de visitar o atender a alguien.
6. Después de tocar las manijas de la puerta.
7. Después de estar en lugares públicos concurridos.