Mucha información se conoce sobre la obesidad, pero solo una cantidad de esa gran parte se cataloga como cierta. Según el Ministerio de Salud, el exceso de peso es un problema de salud pública en Colombia, con una prevalencia del 56.4% en adultos de 18 a 64 años. Lea aquí: Obesidad: más de mil millones de personas en el mundo padecen esta condición
La obesidad concierne a la acumulación anormal o excesiva de grasa que no solo afecta la apariencia física, sino que también está relacionada con una serie de enfermedades crónicas.
Con frecuencias, las personas aseguran que “cuando un alimento es bajo en grasa o sin grasa es sinónimo de cero calorías”, y es un total mito, la verdad es que los alimentos que son bajos o sin grasas generalmente tienen menos calorías que la misma porción del alimento original. Sin embargo, sucede también que muchos alimentos procesados bajos o sin grasas tienen las mismas calorías o incluso más que sus versiones originales ya que se le agrega azúcar, harina o espesantes a base de almidones para lograr una textura y sabor aceptables al remover la grasa.
Afirmar que “comer durante la noche engorda” también es un mito, la verdad es que no importa en qué momento del día se come, sino qué y cuánto se come, así como la actividad física que se haga. Los anteriores factores determinan si se gana, mantiene o pierde peso. En este sentido, se recomienda evitar el consumo de grasas, azúcar, alimentos industrializados y “comidas rápidas”, mantenerse hidratado y realizar al menos 30 minutos de actividad física diaria. Le puede interesar: Obesidad y alcohol impulsan el aumento de las tasas de cáncer de intestino
Las pacientes que creen que “sudar favorece la pérdida de peso” tienen información errada, lo cierto es que perder peso implica perder grasa. El sudor, por su parte, es agua, por lo que los métodos como plásticos, fajas y saunas para intentar sudar y bajar de peso, sólo sirven para perder agua, que se recupera en cuanto se beben líquidos nuevamente.
Mitos al descubierto$>
¿Es malo comer entre comidas?
Expertos de la salud aseguran que existen recomendaciones específicas de acuerdo con la historia clínica de cada paciente, sin embargo, en algunos casos, sí se recomienda comer cada 3 a 4 horas para no llegar con demasiada hambre a la siguiente comida y evitar las fluctuaciones de tu glucemia. Lo más importante es tener metas de alimentación que consideren un equilibrio de varios grupos de nutrientes.
¿Las vitaminas engordan?
Médicos especialistas indican que las vitaminas son nutrientes que no aportan energía y, por tanto, no engordan. Lo primordial es tener una buena alimentación balanceada.