Ni duchas vaginales ni lociones perfumadas con olor a lavanda requiere la vulva. Esta es una conclusión manifestada una y otra vez por expertos, no obstante, hay mujeres que insisten en hacer uso de este tipo de productos para su higiene íntima, seducidas por la intensa publicidad, exponiéndose a infecciones, irritaciones y otras afectaciones.
Si eres de las que aún se pregunta qué productos usar y cómo limpiar la vulva, estas son las respuestas de expertas en la materia.
Diana Montesinos, fundadora de Pansy, marca de geles y aceite cuya finalidad es normalizar el cuidado íntimo, aseguró en un artículo de S Moda que lo principal a la hora de elegir un producto es que sea respetuoso con el cuerpo, pues influye directamente en nuestro bienestar. Lea: ¡Ojo con los excesos! Consejos para la correcta higiene de tu zona V
“Tiene que estar formulado con ingredientes naturales, de calidad y que respeten la barrera natural externa de nuestra zona íntima. En realidad, los productos de higiene íntima propician un extra de bienestar y comodidad en una de las zonas más sensibles de nuestro cuerpo. Existe realmente una diferencia tangible entre utilizarlos o no”, asegura.
Y aclara: “Estos productos se aplican en la zona genital externa. La vagina tiene su propio mecanismo de limpieza a través del flujo, y la limpieza de la zona debe limitarse al exterior, es decir, a la vulva”.
Para Maite Fernández, experta en ginecología funcional y cirugía vulvar y Embajadora en España de LELO, marca líder en productos eróticos de alta calidad, lo primero que debes tener en cuenta que se trate de productos diseñados para la zona íntima y que mantengan el pH vulvar adecuado para tu edad.
“No es lo mismo una niña, una mujer en menopausia o una en edad fértil. El pH vaginal va cambiando, y tenemos que recordar que todo lo que hagamos en la vulva puede alterar el equilibrio dentro de la vagina. Por ello hay que elegir toallitas, limpiadores o geles vulvares que mantengan el pH adecuado para la edad de la mujer”, expresa. Lea: ¿Mal olor y flujo inusual?: así puedes combatir la vaginosis bacteriana
Aclaremos mitos
- Hay que lavarla mucho. Uno de los grandes mitos sobre la limpieza de la vulva es que hay que lavarse mucho y no con una vez al día es suficiente, señala Fernández.
“El paso a paso ideal para lavar la vulva es hacerlo una vez al día con un gel íntimo, preferiblemente adecuado a la edad de la mujer, y después aplicar una crema hidratante, sobre todo en las mujeres depiladas. Es importante también usar braguitas de algodón y evitar o no utilizar salvaslip, ya que altera también la flora vaginal”, explica a S Moda.
- Usa duchas vaginales o productos perfumados. La doctora Marta Sánchez-Dehesa, directora de HM IMI Toledo y jefa del equipo de ginecología, reitera que no es necesario usar duchas vaginales. De hecho, estas pueden interferir con el equilibrio natural de bacterias en la vagina, lo que aumenta el riesgo de infecciones.
Al respecto, la doctora Bárbara Fernández del Bas, especialista en Ginecología y Medicina de la Longevidad de Longevity Hub by Clinique la Prairie Madrid, indica a la revista española que los genitales femeninos tienen un ph muy específico que, ante cualquier cambio, se modifica y al hacerlo, puede modificar la microbiota vaginal y generar infecciones.
“Por eso sugiero a mis pacientes evitar cualquier tipo de ducha vaginal, y ante la aparición de flujo de características o cantidad diferentes a las habituales, o ante la aparición de algún síntoma como ardor y/u prurito, acudan lo antes posible a su ginecólogo y que procuren no autotratarse. Muchas veces, por motivos de tiempo, vamos a la farmacia a por algún remedio rápido, y nos autotratamos con algo que no es específico para lo que tenemos, como cuando compramos un antifúngico cuando en realidad, lo que tenemos es una vaginosis bacteriana. Si tenemos algún síntoma, es mejor comenzar con algún probiótico oral o vaginal antes de usar un fármaco”, advierte.
- Limpia el interior. Sánchez-Dehesa recalca además que la vagina es capaz de limpiarse a sí misma de forma natural, “por lo que no es necesario limpiar el interior de la vagina con ningún tipo de producto”, señala.
- Baño de vapor para una limpieza profunda. Aunque algunos spas ofrecen este servicio, ginecólogos advierten que esta técnica no está respaldada por una evidencia científica sólida e incluso puede representar riesgos como quemaduras, irritación o desequilibrios en la flora vaginal.
“Es un procedimiento controvertido y consiste en sentarse sobre una silla que contiene un recipiente con agua caliente y hierbas medicinales. El vapor resultante se supone que entra en la vagina y el útero, con el propósito de limpieza”, advierte la Dra. Marta Sánchez-Dehesa.
Vanessa Mackay, portavoz del Colegio Real de Ginecólogos y Obstetras de Reino Unido, dijo a BBC que “echar vapor a la vagina puede afectar al sano equilibrio de bacterias y niveles de pH y causar irritación, infecciones (como vaginosis bacteriana o candidiasis) e inflamación. También podría quemar la delicada piel alrededor de la vagina (y la vulva)”.
Sobre la depilación
Los ginecólogos coinciden en que la misión del vello púbico es proteger la zona de roces e infecciones.
“Desde un punto de vista fisiológico, el vello nos protege la zona genital, por lo que recomiendo evitar la depilación total, dejando al menos uno o dos centímetros de vello, a modo de protección”, comenta la Dra. Bárbara Fernández del Bas. Lea: Depilación: métodos tradicionales y recomendaciones para evitar infecciones
Señala que, ante la ausencia de vello, es necesario lavar la vulva con un gel íntimo. “El tema del vello se trata de una cuestión de moda: no está demostrado que haya más riesgo de tener infecciones. Sin embargo, lo que es cierto es que el vello aísla del roce, y la piel está más expuesta y desprotegida cuando no hay. Del mismo modo que el que lleva el pelo rapado tendrá que hidratarse la piel de la cabeza, necesitamos usar un gel íntimo y una crema hidratante en la vulva especialmente en estos casos”, aclara Maite Fernández.
S Moda cierra su artículo de inmensa utilidad para la higiene íntima femenina recordándonos unas divertidas palabras de la ginecóloga Marimer Pérez: “La vagina funciona como un horno pirolítico: se limpia sola”. Cuida la vagina y la vulva de manera adecuada para no tener problemas, cuidar la flora y mantenerla saludable.
Sí es importante orinar tras tener relaciones sexuales, subraya la doctora Maite Fernández. ¿Por qué?
“La orina funciona como un lavado de la uretra y hace que las bacterias se vayan hacia fuera. Es importante orinar siempre y, si suele haber problemas de hongos o infecciones a raíz de las relaciones, recomendamos también hacer un lavado vulvar con un gel íntimo; preferiblemente una espuma, que es lo más agradable al tacto”, aclara.