Adelgazar es un verbo, pero también una meta o un anhelo, que causa agotamiento o estrés a más de uno.
Para reducir el grosor del cuerpo, una fórmula de la que se habla poco, pero que hasta los expertos avalan, es caminar a paso ligero. Eso sí, tienes que hacerlo bien y con frecuencia. A continuación, algunas recomendaciones para que te traces una meta semanal y la consigas. Lea: Esta es la hora en la que tienes que cenar si quieres perder peso
¿Cuánto debo caminar a la semana?
Hazlo, como poco, tres veces a la semana. De acuerdo con el portal 20 Minutos, los expertos coinciden en que es importante no hacer nunca una sesión inferior a 20 minutos, por tanto, lo ideal sería 30 minutos diarios, que es el tiempo que tarda el cuerpo en activar la quema de calorías; o 150 minutos a lo largo de la semana.
Practica el ‘power walking’ (caminando con fuerza)
Esto significa que camines a un ritmo sostenido y rápido. La velocidad solo depende de ti, pero debe ser aquella que te permita caminar con la técnica correcta.
El Colegio Americano de Medicina del Deporte (ACSM) recomienda hacerlo a una velocidad entre los 4 y los 6 kilómetros por hora. No obstante, es aconsejable cambiar de ritmos e intensidades de marcha para que el cuerpo se acostumbre a la demanda energética. Lea: Dietas para adelgazar: las hacen más hombres que mujeres, ¿por qué?
Respira correctamente
El cómo respiras repercute directamente en tu capacidad de alargar el esfuerzo, por ello debes inspirar por la nariz y expirar por la boca, siguiendo un ritmo natural y acompasado, justo esto último es clave para perder peso.
Cuida la técnica
Cuántos más músculos muevas mayor será el gasto calórico. Por eso, los entrenadores personales recomiendan balancear los brazos de forma constante (el brazo derecho con la pierna izquierda y viceversa) pero sin forzar, mientras caminamos.
Cambia de rutas
La monotonía y el aburrimiento son las causas por las que se abandonan muchas cosas en la vida, incluso en la rutina de caminar. Para evitar caer en ellas, cambia de rutas siempre que puedas, fomentando así tu motivación y curiosidad. Además, puedes aprovechar para salir con tu perro o invitar amigos, para hacerlo en compañía.