El cáncer gástrico es una enfermedad que surge ante la proliferación descontrolada de células de la mucosa gástrica, formando una masa que invade las capas de la pared del estómago y puede ocasionar problemas obstructivos en la cámara gástrica.
“Además, las células cancerosas tienen capacidad para escapar del entorno del tumor primario y migrar hacia otros órganos, primero los ganglios linfáticos regionales y luego originando las metástasis a distancia”, explica el doctor Manuel Durán Poveda, jefe del Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Universitario Rey Juan Carlos de Móstoles (Madrid).
Concretamente, el cáncer gástrico es hasta dos veces más frecuente en los hombres que en las mujeres, señala la doctora Brezo Martínez Amores, jefa del Servicio de Oncología Médica del hospital mostoleño, y su riesgo aumenta a partir de los 50 años, siendo máximo a partir de los 70.
Precisa la especialista que, a nivel mundial, es el quinto cáncer más frecuente, y con un millón de casos nuevos al año, aproximadamente. “La incertidumbre ante el futuro es una de las mayores dificultades a las que se enfrentan los pacientes con cáncer gástrico”, lamenta Martínez.
Los síntomas principales
El doctor Manuel Durán Poveda, jefe del Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del mismo centro sanitario, mantiene que, aunque muchos pacientes son asintomáticos, entre sus principales síntomas se encontrarían la pérdida de apetito, hemorragia digestiva, ardor retroesternal y disfagia, indigestión, dolor abdominal en la parte superior, cambios de ritmo intestinal, pérdida de peso, cansancio, náuseas y vómitos, o sensación de plenitud precoz. Lea: Cáncer gástrico, el enemigo oculto
En la misma línea, la doctora Brezo Martínez recuerda que es importante consultar los síntomas de alarma con el médico de atención primaria, tales como el dolor de estómago, ardor, náuseas o exceso de gases, especialmente si estos no remiten tras la pauta de un tratamiento.
¿Cómo prevenirlo?
Para prevenir el cáncer gástrico esta experta recomienda no tener un estilo de vida sedentario, mantener el normopeso, así como seguir una dieta rica en fibras, frutas y verduras. Lea: Mexicanos buscan prevenir cáncer gástrico a través de análisis de bacteria
A su vez, aconseja el bajo consumo de alimentos ricos en sal y de ahumados, evitar el consumo de alcohol y tabaco, una adecuada conservación de los alimentos y tratar la infección por ‘pylori’ en el caso de ser familiar de primer grado o estar afecto ya de este cáncer, entre otros puntos.
A juicio la doctora Martínez, en personas de familias con síndromes hereditarios de cáncer gástrico y en pacientes con enfermedades predisponentes es igualmente importante la realización de gastroscopias de cribado en aquellos familiares sanos, para favorecer una detección precoz de la enfermedad.
En el resto de la población, y de acuerdo con las principales guías internacionales, esta experta subraya que no existe a día de hoy evidencia científica que aconseje programas de cribado o screening con endoscopias en la población general.
Dada la idiosincrasia del tumor, el doctor Durán mantiene que los pacientes se enfrentan durante el proceso a la incertidumbre de su futuro, por lo que todos son evaluados desde un comité multidisciplinar de tumores digestivos, que les ofrece el mejor diagnóstico.
Por su parte, la doctora Martínez sostiene que los tumores precoces pueden ser tratados con resección local; sin embargo, y en los casos más avanzados, pero sin metástasis a distancia, la estrategia terapéutica óptima es la administración de quimioterapia antes de la intervención, y luego realizar la cirugía con criterio oncológico.