Llega Semana Santa y con ella la oportunidad para compartir y cocinar en familia, acciones que algunos hacen extensivas a amigos y vecinos, aprovechando los días de descanso y reflexión.
No obstante, esas recetas especiales pueden causar una serie de malestares indeseados y terminar en una intoxicación alimentaria, también conocida como enfermedad trasmitida por alimentos, si usted no tiene sumo cuidado. Lea: 4 recomendaciones para evitar intoxicaciones por consumo de mariscos
La Clínica Mayo explica que “los alimentos pueden contaminarse en cualquier momento desde que salen de la granja o la pescadería hasta que llegan a la mesa. El problema puede comenzar durante el cultivo, la cosecha o la captura, el procesamiento, el almacenamiento, el transporte o la preparación”.
Bacterias, virus, parásitos, venenos también llamados toxinas y moho están entre los elementos que pueden contaminar sus alimentos en cualquier lugar en el que se manipulen, incluidos los hogares, por el lavado incorrecto de manos, no desinfectar las zonas donde se cocina o se come y el almacenamiento indebido.
Consultado por El Universal, el médico Sixto Barriga Ordosgoitia compartió cinco recomendaciones para evitar intoxicaciones por alimentos en Semana Santa.
“Primera, evitar comprar alimentos en carreteras o lugares de paso. Segunda, al momento de comprar, saber en qué lugar hacerlo; tercera, conocer o saber si el producto fue refrigerado antes de la compra; cuarta, cocinar bien los alimentos, sobre todo mariscos y pescados; y quinta, al cocinarlos, consumirlos lo más pronto posible”. Lea: 10 consejos para evitar intoxicaciones alimentarias
Sobre esta última recomendación argumentó que, por un lado, los alimentos conservados a temperatura ambiente por un tiempo prolongado pueden contaminarse. Por otro, los alimentos que se conservan en el refrigerador por mucho tiempo o en un congelador que no enfría bien también pueden caducar.
“En Semana Santa, muchas familias preparan comidas y le guardan a vecinos, amigos, parientes, pero los mariscos y los pescados cuando pasan mucho tiempo a temperatura ambiente, sin refrigeración, se dañan”, aseguró el médico.
Recalcó que a estos tradiciones platillos “hay que refrigerarlos después de hacerlos y los alimentos que se preparen también deben tener una buena refrigeración previa. Entre más refrigeración mejor”.
¿Por cuánto tiempo?
Ante lo manifestado por el médico, usted se preguntará: ¿por cuánto tiempo se pueden guardar alimentos en el refrigerador de manera segura?
Según la Clínica Mayo, se pueden guardar durante 3 o 4 días. En adelante, el riesgo de intoxicación alimentaria aumenta. “Después de 3 o 4 días, pueden aparecer gérmenes, también conocidos como bacterias. Esto aumenta el riesgo de intoxicación alimentaria. Lo más peligroso es que, por lo general, las bacterias no cambian el sabor, el olor ni el aspecto de los alimentos”. Por el riesgo que esto representa, lo mejor es botar el alimento si tiene dudas sobre su estado.
Malestar estomacal, diarrea y vómitos son a menudo síntomas de la intoxicación alimentaria. Por lo general, estos se presentan varias horas o días después de comer el alimento en cuestión. La mayoría de las personas presenta una forma leve de la enfermedad y mejora sin recibir tratamiento.
Los bebés y niños deben consultar a un médico si presentan vómitos, diarrea y alguno de los siguientes síntomas: cambios inusuales en el comportamiento y en la forma de pensar, sed excesiva, poca o ninguna micción, debilidad, mareos, diarrea que dura más de un día, vómitos frecuentes, sangre o pus en las heces, heces negras o alquitranadas, dolor intenso de estómago o de recto, fiebre en niños menores de 2 años, fiebre de 38,9 grados Celsius o superior en niños de mayor edad y antecedentes de otros problemas médicos.
Los adultos deben consultar si presentan algunos de estos signos: síntomas del sistema nervioso, como visión borrosa, debilidad muscular y hormigueo en la piel, cambios en el comportamiento o en la forma de pensar, fiebre de 39,4 grados Celsius, vómitos frecuentes, diarrea que dura más de tres días, y síntomas de deshidratación, como sed excesiva, boca seca, poca cantidad o ausencia de micción, debilidad grave, mareos o aturdimiento.